Tamar Guimaraēs te trae un reto: descifrar su obra. Su exposición, “El Tejido Hablado”, te espera hasta el 26 de diciembre en el Museo Casa del Alabado para que le eches un ojo y saques tu teoría más loca de qué significa. Acá te contamos la nuestra.
Exposición “El Tejido Hablado”, de Tamar Guimaraēs / Fotos: Lilibeth Acuña
“El Tejido Hablado” es un telar de 20 metros de largo que lleva la trama de una conversación de la propia artista Tamar Guimaraēs con su curador. ¿Qué dice la tela? No se sabe. Lo que sí sabemos es que, así como las paredes hablan, las telas también.
El arte es lenguaje y mientras más post-modernos nos volvemos más se diversifican las formas de contar y expresar. Pararse frente a una obra de arte contemporáneo es casi siempre tener un signo de pregunta enorme en la cabeza y simultáneamente asentir como si en realidad todo estuviera claro. A veces, el arte es inefable: no se explica, no se traduce, pero ahí está.
La obra de Guimaraēs propone explorar el arte precolombino -las vasijas de barro, urnas funerarias y figuras de cerámica que te llevaron a ver en la escuela- desde lo intraducible. Tamar registró una conversación con su curador, y tejió las vibraciones sonoras sobre una tela de 20 metros. Aunque no podemos escuchar las voces, hay algo que este telar está gritando: que tampoco podemos leer, ni entender, ni saber qué dice el arte precolombino, y quizá, ningún arte en absoluto.
Entonces, ese cuadro de arte contemporáneo con una sola gran mancha de pintura que no logras descifrar, es igual de misterioso que cualquier otra pieza de arte precolombino. Valdría preguntarse si quizá todo el arte es así. Hay una obra colgada en la pared o una película en la pantalla, y la puedes intentar leer, pero esa obra ya no es la misma que hizo el artista, esa obra es tuya.
La pieza de arte, cualquiera sea esta, permite ver las líneas, formas y patrones que presentan un reflejo inexacto de lo que pretendía el autor, y uno mucho más preciso sobre lo que tú, como espectador, pretendes entender.
La creadora de este laberinto es Tamar Guimaraēs, artista visual brasileña, nacida en Belo Horizonte y residente en Dinamarca. Sus obras han girado alrededor del mundo, incluso siendo expuestas en museos como el Tate Modern en el Reino Unido, o el Museo Reina Sofía en Madrid. Aparte de hacer instalaciones ultra misteriosas como El Tejido Hablado, Tamar es una reconocida cineasta.
En sus filmes ha explorado temáticas relativas a las realidades socio-culturales en Brasil. Entre ellos está la película Canoas (2010), que “critica la caracterización de Brasil como un paraíso erótico en el que el deseo trasciende a la estratificación de clase y raza”, en palabras de la curadora y escritora Stefanie Hessler.
Con esta nueva pieza, Guimaraēs nos desconcierta y seduce en partes iguales a todos los mortales que aún buscamos cómo entender el arte. “La invitación es de carácter especulativo: no quiere generar respuestas, no concibe aproximaciones correctas. Sólo busca responder, con nuevos enfoques, a una historia larga, delicada y con pocas certezas,” comentan los organizadores del evento.
Para jugar al detective con Tamar, puedes visitar la exposición hasta el 26 de diciembre en el Museo Casa del Alabado, ubicado en el Centro Histórico de Quito. Para más información puedes escribir a educacion@alabado.org . Trae tu cuadernito de apuntes, puede que la investigación dure un rato.
