Sácame a Pasear es un paseo a través de los sentimientos, la incertidumbre y las emociones de dos adolescentes, cuya historia nos invita a caminar junto con las protagonistas y volvernos parte de su relación.
Dirección: Micaela Rueda
Protagonistas: Samanta Caicedo (Sara), María Juliana Rángel (Andrea)
País: Ecuador
Año: 2016
Duración: 70 min
Funciones: Desde el 24 de septiembre en salas de cine a nivel nacional
Pensar en una historia de romance adolescente te llena automáticamente de preconcepciones, comienzas a imaginar una película en tu cabeza sin ni siquiera haber visto el póster. El cine gringo nos tiene acostumbrados a esperar ciertas cosas en largometrajes de este género: una historia melosa y una trama predecible y llena de clichés. Este no es el caso de Sácame a Pasear, porque no es lo que esperas ver al escuchar que es una película de romance adolescente.
Sácame a Pasear, es una coproducción entre Ecuador, Colombia y México, está inspirada en el guión de Juan José Vallejo y es la ópera prima de la directora ecuatoriana Micaela Rueda. La historia sigue a Sara, una estudiante de último año de colegio, que por su personalidad introvertida se siente un poco aislada. Ella conoce a Andrea y casi de inmediato establecen una conexión. A medida que comienzan a pasar tiempo juntas y poco a poco la amistad se va convirtiendo en algo más, esta relación las empuja a conocer y conectar con su entorno y con sí mismas. Un conjunto de emociones que vienen con la adolescencia, la pubertad y las relaciones se mezclan.
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Sara y Andrea. Cortesía.
Sobre la idea de la peli
Sácame a Pasear nació hace algunos años cuando Micaela y Juan José estudiaban en la Universidad del Cine en Buenos Aires, él le comentó la idea y a partir de ahí fue fluyendo de manera orgánica.
“A partir de las múltiples conversaciones con él fui compenetrando poco a poco con los personajes y los espacios articulaban la estructura. Me sentí muy cercana al personaje de Sara, muchas situaciones y sensaciones me resonaban y me conectaban directamente con la época adolescente”, dice la directora.
La película tiene una visión diferente, Micaela viene del cine documental y hace que su visión se sienta mucho más anecdótica, va más hacia interiorizar sobre los personajes y conocerlos a través de cómo se sienten. La trama se concentra en la relación de las dos y no está llena de conflictos externos que la saturen.
“Me interesaba mucho apostarle a estas imágenes más contemplativas, más de observación, y construir a partir del sonido y de esas imágenes una subjetividad de cómo se sienten ellas”, señala Micaela.
Micaela Rueda durante el rodaje. Cortesía.
Al estar enfocada solamente en la relación entre las dos, la película corre el riesgo de volverse plana o sentirse vacía, pero al no haber distractores la película tiene la oportunidad de desarrollar mucho mejor en el cómo se relacionan los personajes y los cambios que van sintiendo a lo largo de la película. Le brinda al espectador la oportunidad de acompañarlas de cerca, nos sentimos parte de su relación, la descubrimos con ellas y, nos adentramos en su burbuja hasta casi convertirnos en parte de su relación.
Una ciudad a través de la música
La música es un recurso clave en la generación de este vínculo de la audiencia con los personajes y se hace presente desde el título.“Sácame a pasear entre antenas de televisión que apuntan al aire”, es la letra de la canción Sindrome de Uppslala de Biorn Borg.
Nos acercamos a los personajes a través de lo que escuchan, retratando quienes son pero también el espacio en el que se encuentran. Quito no se hace presente visualmente, no hay paseo por el centro histórico, no hay monumentos ni letreros pero está presente a través de la música, a través de varios artistas locales que forman parte del soundtrack, artistas como Biorn Borg, Da Pawn, Ricardo Pita y Paola Navarrete.
La sinergia entre las canciones y los personajes se da de una forma natural, no se siente forzada. Es la música que los personajes escuchan y es donde encuentran su zona de confort . La idea de apoyar el desarrollo de los personajes en las canciones que escuchan viene desde una primera etapa de escritura pero la selección de artistas y canciones no.
“Nos interesaba que esto no nazca desde una huella de dirección o guión, sino de una manera natural, desde los personajes. Entonces existían muchos conciertos, existían bandas, pero en realidad no había como muy especificado cuáles eran las bandas”, explica Rueda.
El soundtrack perfecto
La selección de canciones finalmente se da en un trabajo en conjunto con Samanta y Juliana, las actrices. Los personajes se terminaron de construir con las actrices, prestando atención a quienes eran, los lugares que frecuentaban y la música que escuchaban.
Cortesía.
La música fue realizada por Jason De la Vega, guitarra y sintetizadores de Guardarraya. Él tiene una relación cercana con la directora, lo que le permitió conectar directamente con su visión y a través de sus composiciones, presentarnos estas emociones tanto en la lírica como en la melodía.
Sacame a Pasear se estrenó en el South by Sidewest en Austin, Texas en el 2016. Participó en la categoría SX Global del Festival SXSW en la que fue la única película ecuatoriana. Esto le dio paso a participar en más de 30 festivales internacionales como el SSIFF, Raindance y el BAFICI. En Abril de este año se estrenó en México donde se presentó por tres meses y llegó a ser la cuarta película más vista en la cinemateca durante ese tiempo. Finalmente, hoy, 24 de septiembre Sácame a Pasear llega a salas de cine a nivel nacional.
Fuera de la importancia de apoyar producciones locales, especialmente en estos tiempos, esta película es una oportunidad para volver a conectar con emociones y sensaciones de las que pudimos habernos alejado. Es una invitación a reflexionar sobre nosotros y nuestras relaciones. No te llevas necesariamente imágenes o situaciones sino que te quedas con un sentimiento, te quedas con esta nostalgia que no termina con la película. Te quedas con la sensación de que pudo durar más y en ese sentido la película es como el romance adolescente, intenso y fugaz.
