Un balance preciso entre brutalidad y atmosférico, los tres discos de música pesada que nos trajo octubre no buscan ser psicodélicos ni en extremo técnicos, simplemente letales.
Labyrinth of Stars / Album: Spectrum Xenomorph
Entre los estrenos completamente inesperados de este año encontré flotando en lo oscuro del espacio una placa que absorbía toda luz de su alrededor y no la dejaba escapar.
Este experimento inicial de criaturas inhumanas no da tregua ante la inmensidad de la creación lograda. Los ingenieros de semejante propuesta musical están —al igual que en la serie de ciencia ficción Alien, de la cual se inspira la obra directamente— absortos en el propósito de ejecutar una obra fría, fosilizada y letal.
Cual una lengua mortífera, el death metal de los alemanes Labyrinth of Stars devora a todo su ecosistema, lo infesta y se vuelve, sin más remedio, una plaga. Destaco, especialmente en esta arremetida, las ejecuciones directas de temas en su gran mayoría incansables, inmisericordes, que solo aguardan ante la culminación de lo indetenible, el exterminio absoluto.
Con 8 temas dentro de Spectrum Xenomorph, los 7 primeros son la realización de todo el macabro plan de propagación del parásito para, en su apogeo, tener que recurrir al éxodo ante un entorno hostil, ya a la deriva. Así, el tema 8 es solo instrumental, sin vida a la cual contaminar.
Destaco, de igual manera, que tiene un balance preciso entre brutalidad y atmosférico, no busca ser psicodélico ni en extremo técnico, simplemente letal.
Gaerea / Album: Mirage
Los portugueses Gaerea han tomado por asalto los últimos seis años que tienen de existencia como proyecto a la música pesada. Siendo esta su tercera placa completa, creía correcto escribir sobre ellos, pues de a poco y con pulso se han ganado un puesto en el black metal europeo, del cual, sin duda, no son una banda de encapuchados más.
Justamente como una horda de encapuchados, en sus líricas se ve temáticas sobre narcisismo, alienación y misantropía. Lo que es curioso es que, dentro de esos tópicos, se han afianzado en su propuesta, tanto musicalmente como en la teatralidad requerida para hacer de todo esto un evento destacable y más que nada, entretenido.
A pesar de algunas licencias que musicalmente rebajan los decibeles a un sonido mucho más post o gaze, los temas se sienten tan cómodos en la ejecución que solo se explica con la suficiente madurez y sensibilidad de lo ofrecido.
Con manos completamente cubiertas de tinta, la oscuridad que proclaman en Mirage es simple: se busca la belleza en lo escueto de lo que nos mantiene vivos a pesar del sufrimiento; y que se ve como un espejismo, al que en algunos momentos se puede casi topar, pero como siempre, se escurre entre los dedos.
Escuela Grind / Album: Memory Theater
El escupir frases y gritar alegorías —como solo el grind lo puede hacer— tiene en la última placa de los nativos de Massachusetts a uno de sus mejores representantes de la actualidad. Un ritmo que normalmente se caracteriza por la violencia, velocidad y furia tiene que tener, en mi opinión, sobre todo Groove (un término que en español sería: ritmo pegajoso). Y esa combinación hacen de Escuela Grind una verdadera institución del metal.
Destaca la presencia al frente de la banda de la carrasposa y lacerante voz de Katerina Economou, con una evolución significativa desde su disco anterior, Indoctrination (2020), al cual le encuentro un salto acertado en otros tantos aspectos. La composición especialmente fue mucho más detallada, limpia y de calidad, si eso se puede decir de un ritmo como el grind.
Personalmente, la mezcla de toques del death metal y hardcore en varios temas del nuevo disco los hace mucho más atractivos que tan solo un arrollador beat y distorsión. De lo que no cabe duda es que la agresividad y solidez con la que presentan Memory Theater lo vuelve una placa a ser manifiesta, en la que las temáticas de crítica social, adoctrinamiento y manipulación mediática tienen preponderancia, formando toda una combinación lista para reventar al contacto.