Dos discos brutales de Latinoamérica y un envidiable trabajo de death sinfónico se juntan para desafiar a tus oídos. Dale una buena probada a la lista del mes.
1. SELBST / Álbum: Relatos de Angustia
Una de las sorpresas de este año, en las profundidades del abstracto mundo del black metal, llega desde Venezuela. Llena de una de las mejores atmósferas oscuras y lúgubres que he escuchado.
Radicado en Chile, SELBST es el resultado directo de un solo hombre que batalla en el plano creativo. N es quien comanda SELBST como si esta fuera una monstruosa criatura viviente cuyos movimientos son ejecutados por un solo maestro. Ya en vivo, la banda cuenta con varios músicos que plasman el terror que N transmite desde la creación.
Es algo fuera de lo común encontrar, en el ámbito latino, bandas con un sonido claro y algo alejado del black trash metal más común, o de uno a la usanza de la segunda ola del BM, a pesar de las saturaciones características. Y que, igualmente, estén repletas de influencias más modernas, con pasajes que nos recuerdan a los islandeses Zhrine, a los polacos Mgla o a los franceses Deathspell Omega. Aun con todo esto, SELBST es una bestia única por si sola.
2. Avernal / Álbum: Tzompantli
Quedándonos por Sudamérica, hace poco los argentinos Avernal, con un amplio recorrido en las tablas, volvieron, con un excelente disco. Una obra con riffs agresivamente pesados y una renovada aura agresiva. Un placa que rompe cabezas con su endemoniado ritmo.
El death metal de Tzompantli es muy parecido al significado de esta palabra maya: un muro de cráneos. Uno que permanece junto a otro luego del sacrificio. Tema tras tema, vemos cómo se celebra la muerte como parte de la recreación humana de lo incierto de la vida: contemplar sin temor y abrazar lo desconocido.
Curiosamente, una de las primeras reviews que escribí para RC, allá por el 2016, incluyó a La Quimera de la Perfección, otro disco brutal. Es bueno ver que siguen con esa maldad luego de ocho discos.
3. SepticFlesh / Álbum: Infernus Sinfonica
Algo que me resulta fuera de lo común al momento de hacer una reseña son los discos en vivo. Especialmente porque carecen de novedad, o porque su producción, muchas veces, no es la adecuada para ser destacable.
Sin embargo esta vez, los griegos SepticFlesh han puesto en escena un espectáculo envidiable. Siendo una de las bandas de death metal sinfónico más potentes desde hace mucho tiempo —personalmente pienso que su talento esta terriblemente infravalorado—, junto a la Orquesta y Coro Filarmónico de Toluca, en México, lograron un álbum que queda para la posteridad entre las mejores colaboraciones entre orquesta, coros y metal.
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La colisión de estos mundos, cual si fuera la banda sonora del apocalipsis, ha plasmado con peculiar grandiosidad los alcances que puede tener esta efectiva combinación de música épica. Destaca el acierto de la locación y, sobre todo, la actitud de los públicos latinos, que son bastante apreciados por muchas bandas a causa de su entrega.
