La banda de «pop-gay» más popular del Ecuador ha destacado durante su trayectoria por lo sensual y provocativo de sus letras, pero también por haber ensamblado un prolífico aparato de producción audiovisual con el que ha sabido tocar a sus fans y a sus no tan fans.
Toda gran historia tiene un comienzo inesperado. ¿Cuántas óperas sublimes no han salido de un cuarto de baño, o cuántos poemas maravillosos no han brotado de una mañana de resaca para tocar las fibras más hondas de nuestras almas?
La historia detrás de los videos de Tonicamo, la banda de pop-gay más popular del Ecuador (y quizás de la región), no dista demasiado de entrar en esa fórmula. No conformes con ensalzar nuestros sentidos con sus provocativas melodías, estos visionarios del indie queer alternativo desataron un universo audiovisual hipnótico que ha crecido exponencialmente en el último par de años para fascinarnos más allá de su música. Y todo surgió por casualidad, después de una noche de copas.
Nos sentamos a conversar con los fundadores de la banda para que nos contaran los secretos detrás de su mirífico universo audiovisual, y aquí está el resultado. Esto es, Tonicamo Film School.
La Historia
La cita ocurre en una tarde veraniega de Quito. Nos sentamos bajo las hojas de un árbol para conversar a gusto acerca de la inspiración con la que ejecutan sus piezas audiovisuales.
Pablo Dávila y Ernesto Torres, ambos guitarra y voz de la banda, cuentan risueños que su incursión en el mundo del video no fue decidida. «Los primeros (videos) que sacamos fueron esos de La Fiesta del Flaco. Estábamos chupando y pensamos que el Rubén (González, bajista de la banda) en serio habla igualito al Guanaco», dice Pablo. «No, ¡ni vergas!», interrumpe Ernesto tajante. «¡No! En serio, le admiraba», defiende Pablo, «entonces sabía cómo hablaba y fue como que: ‘Ya loco, hay que sacar una huevada así'».
Podríamos decir que en ese momento quedó demostrada la naturalidad con la que los Tonicamo sabrían apropiarse de las pequeñas joyas que encontraban en su mundo cotidiano para darles vida y retratar con gracia sus inquietudes emocionales y aquello que les llamaba la atención del mundo de la música independiente en nuestro país.
Así, inspirados por el licor que lubricaba su creatividad en esa noche, decidieron grabar los tres videos promocionales que servirían como base de una extensa filmografía en el futuro. Primero fue Rubén con su magna imitación de Guanaco MC. Luego, Pablo se metió en la piel de Mauro Samaniego de Da Pawn, y finalmente, le tocó su hora al Flaco (Javier Masache, el tecladista). «Llegó el Flaco y ya lo teníamos pensado. Le dije: ‘Loco, tienes que desnudarte y ponerte sobre esta alfombra’. El man no estaba ebrio ni nada», cuenta Ernesto con brillo en los ojos. El Flaco encarnó a Sofía Abedrabbo de Biorn Borg, y así se cerró la primera trilogía de videos, con un broche de oro tildado de erotismo.
La Fiesta del Flaco, según cuentan Pablo y Ernesto, es el evento anual más importante que lleva a cabo la banda, su show más personal y más explosivo para homenajear a su integrante más sensual. Cada cumpleaños del Flaco la banda se reúne para celebrar con una enérgica descarga de «leche», como les gusta nombrar a su música. Aunque no han llevado a cabo esta bacanal hace dos años aproximadamente, hoy podemos agradecer su existencia como el catalizador del mundo cinematográfico de Tonicamo.
En adelante, la banda sintió encenderse una mecha creativa que los impulsó a renovar su imagen. Según cuentan, cuando iban a tocar con la banda chilena Dënver en su paso por Quito, la productora del evento les pidió que enviaran una invitación en video. Ellos, decididos a no parecerse a los demás, aprovecharon la viada y tomaron la oportunidad para montar una nueva pieza audiovisual. Ahora consideran que ese promo fue el primero en ser guionizado y el que inauguró la costumbre de hacer cápsulas en video para el futuro.
En ese momento tuvieron una epifanía: «Se pueden contar otro tipo de historias sin la necesidad de decir ‘anda al concierto'», dice Ernesto. Los videos comenzaron a cobrar vida propia como una nueva rama de su obra, e inconscientemente se disociaron de la música. Hoy en día admiten que la relación entre el número de vistas de sus videos no es directamente proporcional al número de asistentes a sus conciertos.
No obstante, eso no les molesta. Los Tonicamo ejecutan su obra más allá de los miramientos que el público pueda tener sobre ella: «Sí se difunde, esa es la idea. Pero ya eso ha pasado a un plano secundario. Los videos salen por coyuntura, y sí es importante que la gente vaya a vernos, pero ya no se trata del concierto».
Los videos incluso llegaron a convertirse en un instrumento más de su puesta en escena, pudiendo ser incorporados al complejo entramado de estímulos con el que montan sus shows. Pablo recuerda una pieza en particular: «1 2 3». «Era parte de un concierto en La Butaca. Se abría el telón y alguien salía con un VHS y lo ponía y salía esa huevada de 1 2 3. Al final salía ‘por favor aplaudir’, entonces la gente se quedaba así como que: ‘¡qué chuchas!'», comenta aplaudiendo él mismo.
Con el tiempo, su obra ha ido madurando para adquirir un carácter crítico y auto-reflexivo, algo solo podría concebirse a partir de un cuestionamiento profundo sobre la realidad en que habitan. «(Los videos) son como un medidor para ver qué tan grande tienen el ego (los otros músicos)», comenta Pablo. «Yo creo que (la escena de la música independiente local) es como un pueblo», dice Ernesto. «No es que tienes ni gente famosa ni tienes rockstars, no existe esa huevada. Pero sí existen esas representaciones y esos discursos. Joder a eso es de cierta manera cagarse de risa».
Sus videos han suscitado reacciones de todo tipo en la audiencia. Mauro Samaniego, por ejemplo, no se tomó a mal la personificación que Pablo hizo de él y más bien se río de sí mismo. Al menos así se lo comentó en el concierto de Dënver antes mencionado. No obstante también está la otra cara de la moneda. Cuentan que alguna vez se enteraron de que Sofía de Biorn Borg sí se había enfurecido al verse retratada por el Flaco. Rebeldía pura es, quizás, la síntesis adecuada de los ideales que Tonicamo refleja en su producción.
La polémica que desatan con cada video siempre da de qué hablar al numeroso puñado de personas que los ven (y quizás aún más a las decenas de espectadores que van a los conciertos). Dicen que por momentos les ha tocado llevar una doble vida para esconder sus mensajes candentes de sus familias, aun después de haber colaborado con algunos parientes para sus videos. Pablo comenta, por ejemplo, que no puede enseñarle los videos a sus padres y que tuvo que obligar a su hermano a guardar su secreto bajo juramento.
Afortunadamente, sus novias han aprendido a aceptarlos. Incluso la novia del Flaco, que con el tiempo dejó de sentirse incómoda con su ímpetu irrefrenable de mostrar su esbelta silueta en los conciertos y en las pantallas.
Pablo y Ernesto aclaran la importante diferencia que tienen estos videos con sus videoclips, puesto que son dos ramas autónomas de su filmografía. Quizás incluso, con los videos promocionales disfrutan más por la libertad que les dan para experimentar y la naturalidad con la que pueden ejecutarlos, a pesar de manejar un aparato de producción cada vez más complejo. Dado que en ellas no se sienten limitados a la narrativa de una sola canción, han podido liberar el universo de su imaginación en estas cápsulas.
A continuación les presentamos a manera de fan facts, algunos de los secretos que se esconden en los videos de Tonicamo.
Tonicamo Film School Fan Facts
1. El Flaco es el sex symbol de la banda porque es el que mejor se ve desnudo. Según dice Ernesto: «Flaquito tiene el mojo».
2. La aparición de Pedrito de Lolabúm como el reemplazo del Flaco para ser esclavo sexual de Destiny Horáculo en el video con el que anunciaron su presentación en el Quitofest, fue consensuada. Pedro pidió ver una foto de Destiny, y una vez que hubo evaluado la situación, accedió a ser su esclavo sexual para el filme.
3. El celular que utiliza Rubén en el video del Quitofest es una versión antigua de un modelo de teléfono desechable que se popularizó alrededor del 2004. Incluirlo en el clip fue idea suya.
4. Casi todos sus videos son basados en hechos reales. El único que tiene un elemento ficticio es el video de «El Regalo Perfecto», hecho en navidad del 2015. En él, la señora que rechaza el disco que le regala el Flaco no es su abuelita, si no su tía abuela. A la abuelita del Flaco sí le gusta el disco «Mario López» en realidad.
5. En el mismo video se puede apreciar una pista de quién fue la persona que violó al Flaco antes de su aparición en el video promocional de su primer concierto en Cuenca.
6. El Rubén que toca ahora en Tonicamo no es el mismo que tocaba en los inicios de la banda. Como se puede apreciar en el video superior, Rubén desapareció después de encontrarse con su doble, tras avisarle a la banda de su primera presentación en Cuenca. La última vez que lo volvieron a ver fue tomando colada morada con el tío del Flaco, cuando tuvieron que rescatar a este último de la dimensión desconocida. Esto se puede ver en su video de la «Receta del Tallarín Chispazos». Afirman que no han vuelto a meterse con la gastronomía después de esa experiencia.
7. Todos los efectos especiales y la colorización son hechos en la última versión de Paint y toda la edición se hace en Windows Movie Maker.
8. Dicen que para convertir al Flaco en mujer no hace falta nada más que una toalla en la cabeza. Sin embargo, para convertirlo en Sofía Abedrabbo tuvieron que usar un antifaz en vez de una toalla. Pablo agrega que una buena iluminación puede ayudar también.
9. Ernesto defiende que en la realidad, Guanaco MC es quien imita a Rubén. Pablo agrega que la primera versión de Blasfemia fue hecha por Rubén y que tienen una pelea de derechos de autor que esperan resolver cuando puedan masterizar el disco con el dinero que Rubén obtenga de la venta de todos sus paquetitos de base.
10. Ernesto es el director de fotografía y el editor de todos los videos, dado su trasfondo de estudios de comunicación. Dice que su secreto para colocar la cámara está dado por su sentido del olfato: «donde huele más, ahí es la toma».
11. Ernesto dice que para poder montar secuencias como la del video de «1 2 3», utilizan hasta cinco cámaras para grabar a cada personaje por separado.
12. Para ellos, el soundtrack es una de las cosas que mayor responsabilidad requiere a la hora de montar un video. Ernesto dice que su elección siempre es un homenaje a la música que les inspira y que los ha puesto donde están hoy. En sus videos han homenajeado a Natusha y Eros Ramazzotti, por nombrar un par. En su playlist de influencias importantes también incluyen a bandas como Basca, Mortal Decisión o Bajo Sueños.
13. El secreto para lograr sus complejos arreglos de iluminación son focos ahorradores que cuestan $1,88. «Te tienen que ahorrar plata y luz cuando los pones», dice Ernesto.
14. César Mena (el baterista), es el director de arte de todos los videos y su trabajo es bastante meticuloso. Ernesto cuenta que hacen los videos en un set que está diseñado para parecer un estudio de grabación, pero que no es el estudio donde graban sus canciones en la vida real. César contrata a un grupo de pasantes. Dicen que por ello hay algunos errores significativos, pero que no los van a revelar por temor a «no parecer profesionales».
15. Su consejo para la gente que quiere estudiar cine es tener un papá con bastante plata y la vida arreglada. Esto lo dicen porque el presupuesto que manejan para cada video representa «cifras que crecen exponencialmente». Se reservaron el número exacto, pero dicen que las cantidades que el Ministerio de Cultura ha desembolsado para sus videos se mide a las mega-producciones de Hollywood. Pablo también revela que empezaron trabajando con un crew de 25 personas, pero que en su último video manejaron a un equipo de 90.
16. Antes de cada video todos comparten en un temascal. Ernesto dice con ello se someten a un proceso espiritual para volver a nacer. Pablo agrega que el sentido de esto está dado por el hecho de que filmar no es una cuestión de solo poner la cámara, sino un proceso que requiere de mucha cabeza.
Top-10 de Películas Tonicamo
Finalmente, y a manera de epílogo, nos dejan un listado de las películas que han sido influencias fundamentales de su trabajo. No contentos con compartir generosamente los secretos detrás del altísimo valor de producción de sus videos, aquí nos dejan su lista de inspiraciones visuales, sin orden particular:
- Las películas de la cooperativa Transportes Ecuador, en especial de la ruta Guayaquil-Quito.
- «Qué tan lejos», en especial la escena donde la española dice «Yo te cacho, yo te cacho» y la quiteña dice «El Ecuador man, el Ecuador».
- La segunda temporada de Pasado y Confeso, una verdadera obra del suspenso ecuatoriano.
- «Magic Mike XXL», una verdadera lluvia de hombres bellos.
- «Tu voz estéreo», la canción del intro es tan buena como las conmovedoras historias que nos presentan.
- «Sicarios Manabitas», cada escena exuda acción y manabitismo. ¡Una joya!
- Todas las películas en el circuito del Festival de los Hombres Duros. Adrenalina pura y dura.
- «Patch Adams» y «The Notebook» porque siempre nos llegan al corazón.
- «Bienvenidos», el programa humorístico con las chicas más hermosas y las situaciones más alocadas de la pantalla chica.
- Todos y cada uno de los capítulos de Mi Ecuador Querido de EducaTV. En especial el de platos típicos, porque aprender también puede ser divertido.