En Runa Jazz convergen sonidos ancestrales y modernos, que refrescan la escena musical ecuatoriana. Esta es la historia de cómo se conforman y el mensaje que buscan despertar con este sonido único.
Runa Jazz. Foto: Gonzalo Guaña
Curi Cachimuel proviene de una familia de músicos y danzantes imbabureños. Su pasión por la música se la debe al apoyo de ellos: de sus padres, que lo incitaron a tener una formación musical desde la infancia, y de sus hermanos, quienes viajaron por todo el mundo compartiendo la música tradicional y popular de su tierra.
Su banda, Runa Jazz, emerge en la escena ecuatoriana en 2017, como una propuesta que conjuga ritmos y musicalidades tradicionales, como el sanjuan o el fandango, con sonidos contemporáneos provenientes del jazz.
Entre el legado histórico y la potencia de las nuevas generaciones, han compartido escenario con otros músicos y amigos como Yarina, Awak Taki, Los Nin, Grecia Albán, Alex Alvear y muchos más. Su paso por los escenarios ha sido un aprendizaje constante, y una búsqueda de colores y matices diferentes.
Este 25 de julio, Runa Jazz presentará su primer concierto vía streaming, sin público presente, desde el Teatro Variedades Ernesto Albán, de Quito. Conversamos con Curi sobre su música, sus influencias, y lo que preparan para el futuro.
Ecuador Jazz. Post Concierto. Runa Jazz Foto: Gonzalo Guaña
Daniel Félix: ¿Qué es Runa Jazz?
Curi Cachimuel: Runa Jazz es un proyecto musical que busca entretejer la diversidad cultural andina con los ritmos tradicionales latinoamericanos y el jazz. Es una agrupación que utiliza instrumentos y melodías étnicas para explorar un sinfín de ritmos.
Pero, sobre todo, es esa raíz con la que hemos crecido y aprendido de nuestros abuelos y abuelas, quienes nos han dejado este legado ancestral. Por esto, la importancia de prevalecer la música andina como columna vertebral de nuestro proceso musical y humano.
D: ¿Quiénes se han unido a tu proyecto?
C: Los integrantes que conforman la banda somos: Luigi Bolaños (batería), Nicolás Cruz (piano), Juan Villarreal (guitarra), Carlos Quilumba (saxofón), Nayri Cachimuel (trombón), Álex Paza (bandolín), Juan Tapias (bajo) Mauricio Ochoa (percusiones) y Curi (vientos andinos).
También nos hemos unido con varios artistas invitados como Linda Pichamba, Carolina Puruncajas, Amalia Trinidad, Alexandra Cabanilla, Sumay Cachimuel, entre otros. Porque este proyecto nace de una necesidad de comunicar, compartir y unir las diferentes culturas a traves de la música.
Curi Cachimuel.Foto: Gonzalo Guaña
D: Runa Jazz tiene una energía festiva. Sus temas transmiten alegría, evocan las fiestas populares ecuatorianas. ¿Esta es la identidad del Afro Kichwa?
C: Dentro de la cosmovisión indígena y las culturas afro, la música es parte escencial de nuestras vidas. Es el ente rector que acompaña todos los momentos de la vida: el nacimiento, el cumpleaños, matrimonio e incluso las luchas colectivas. Es la expresión pura de nuestro diario sentir.
La música negra e indígena hace que dos fuerzas se encuentren y creen una raíz sólida, que demuestra que las culturas nunca están separadas, sino que forman una diversidad con infinitas posibilidades de encuentro.
D: ¿Cuáles son sus referentes musicales?
C: Definitivamente, la música tradicional ha sido la primordial fuente de inspiración para nuestro crecimiento. Grupos antiguos como Ñanda Mañachi, Centro Cultural Peguche, Yarina, Alex Alvear y otros músicos tradicionales que nos han dejado trazado el camino para seguir componiendo y estilizando a nuestra manera, hasta obtener un estilo único y diverso.
Runa Jazz durante el Ecuador Jazz USFQ Showcase. Foto: Gonzalo Guaña
D: En su primera producción discográfica, Afro Kichwa, hablan de un legado oral que inspira su música.
C: Nuestros abuelos y padres han sido un pilar fundamental. Nos han enseñado a valorar y preservar las tradiciones. En honor a ellos seguimos construyendo y aferrándonos a nuestra música, porque es la única manera en la que podemos llegar a la conciencia de la gente. Es una expresión sublime que no necesita explicación alguna para entenderla, sino simplemente sentir y dejarse llevar.
D: ¿Cómo ha sido recibido su primer disco, Afro Kichwa?
C: Siempre es un reto empezar con algo que no es comercial, pero nuestra idea de mantener la música tradicional viva con una fusión contemporánea ha sido muy bien recibida en todos los lugares en los que nos hemos presentado.
De esa manera podemos aportar y ayudar a que la música siga evolucionando y que quede un legado de trabajo musical e investigación. Nuestros primeros conciertos han marcado las lecciones y pautas para emprender este proyecto musical, y por ello son los más significativos, pero en todas nuestras presentaciones ponemos nuestro corazón.
Runa Jazz en la Casa de la Cultura. Foto: Gonzalo Guaña
D: ¿Cómo es el trabajo creativo de Runa Jazz? ¿De dónde surgen los temas?
C: Nuestras canciones nacen de la convivencia diaria, del compartir con la familia, de las relaciones humanas, de los relatos de nuestros abuelos y abuelas. Todas son memorias que brotan de la necesidad de ser expresadas, luego nos juntamos todos los músicos y empezamos a conversar, cada uno aporta ideas y la suerte de tener una banda multicultural hace que nuestros temas finalmente tengan influencias de otras culturas.
Eso ayuda a diferenciar nuestra música. Sin embargo, nunca sonamos igual en vivo, porque siempre vamos añadiendo o quitando cosas de acuerdo a nuestro sentir de ese momento.
D: Este sábado 25 de julio presentarán su primer concierto vía streaming. ¿Qué puede esperar el público de este concierto?
C: Este concierto denominado «Shunku Tushuy» les llevará a un viaje íntimo, visual y sonoro hacia nuestra memoria colectiva que nos enraíce con nuestro pasado, para caminar en el presente y seguir construyendo otros horizontes diversos y solidarios. Se tocarán nuestras melodías del Afro Kichwa y melodías de nuestro próximo disco. También contaremos con las voces femeninas de nuestras invitadas: Grecia Albán y Ana Cachimuel.
Cartel del concierto de Runa Jazz
D: ¿Cómo se han preparado para este concierto?
C: Será una sensación totalmente nueva por el hecho de no tener el calor del público y esa conexión presencial con la gente. Sin embargo, estamos muy emocionados porque finalmente podremos desde el escenario compartir nuestra música.
D: ¿Qué expectativas tienen de este formato sin público presente?
Es un reto llegar a las emociones y el corazón de la audiencia en casa, tratar de cambiar un poco los ánimos e inyectar esperanza con nuesta música. Estamos atravesando tiempos difíciles y por ello es justo y necesario alimentar nuestra alma para seguir.
D: Arriba mencionaste que están preparando su segundo disco.
C: Hay muchas ideas que se están cocinando. Será la continuación del Afro Kichwa, tendremos el aporte de músicos como Alex Alvear, Manolo Mairena, Gonzalo Grau, Fidel Minda y muchos más. Estamos buscando la posibilidad de que el público se abra y se entregue a un mundo sonoro que enriquezca nuestra identidad, pero que también se anime a seguirse juntando, componiendo y apoyando. Hay muchas sorpresas y todo el cariño puesto en esta segunda entrega.
