Por si alguna vez le diste el beneficio de la duda a Marilyn Manson, Phoenix Rising es un relato crudo en primera persona de una de sus víctimas de abuso y tortura física, psicológica y sexual.
Marilyn Manson: Un monstruo escondido ante nuestros ojos es la extensa investigación que la revista Rolling Stone publicó en noviembre de 2021, destapando un historial de abusos y tortura por parte de Manson a sus exparejas.
Que Brian Hugh Warner (nombre real) maltrataba a sus parejas era un secreto a voces dentro de la industria musical. Sin embargo, aquella era la primera vez que un medio pesado como Rolling Stone, además especializado en música, colocaba todas las piezas de una historia de horror.
Poco menos de un año después, Evan Rachel Wood (actriz), una de las sobrevivientes de la controvertida personalidad del rock y metal, ha contado en un documental el tormento que vivió junto a Manson.
No quiero revelar demasiados detalles, para procurar el impacto. Sobre Phoenix Rising, título del documental, me limitaré a decir que está dividido en dos partes, cada una de más de 60 minutos y que está enfocado en la historia de Wood.
El recuento de la relación que ella y Warner mantuvieron durante cinco años es solo una parte de esa historia. Los años posteriores que la actriz ha necesitado para recuperarse y buscar justicia conforman la foto completa.
The Phoenix Act
Fue recién en febrero del 2021 cuando Evan Rachel Wood nombró por primera vez públicamente, a través de un post de Instagram, a Marylin Manson como su abusador.
En 2018, sin embargo, Wood relató frente al Congreso de Estados Unidos los episodios de tortura física, psicológica y sexual a los que fue sometida por su expareja, aunque ocultando la identidad de éste.
Varias víctimas de Manson la contactaron después de esa declaración, y fue entonces que Evan decidió buscar justicia y reparación, pero para entonces, ya no podía presentar cargos contra Brian.
Entre el término de la relación, en 2011, y el 2018 habían pasado siete años. En ese momento, según leyes del Estado de California, el estatuto de limitación para señalar a una persona como responsable de un delito o abuso era apenas de entre 1 a 3 años.
Por esa razón, Evan creó “The Phoenix Act”, una organización sin fines de lucro, con el objetivo principal de ayudar a otras víctimas de violencia doméstica, empezando por ampliar el estatuto de limitación de 7 a 10 años. De allí el nombre del documental que también termina siendo su hilo conductor.
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Más que una reseña, esta es una invitación a mirar el docu, disponible en HBO y aquí. Me parece que es de una importancia tremenda para dimensionar, más allá del morbo, las profundas marcas físicas y no físicas que dejó el abuso en Wood. También, para asimilar cómo su psique fue transformándose durante y después de la relación.
Además, le añade relevancia saber que Brian Hugh Warner sigue allí fuera, libre, sin responder a ninguna de las acusaciones en su contra. Phoenix Rising es una advertencia definitiva de un tipo tan peligroso, que como mencionó la investigación de Rolling Stone, está “escondido ante nuestros ojos”.
Antes de ver el documental, lo único que advierto son los posibles triggerings, porque no son pocos. Véanlo con precaución.
