Guayaquil se siente lista para embarcarse en la nave de los festivales de música y artes de tamaños mayores. La primera edición del Funka Fest se suma a aquellos grandes eventos de entretenimiento que permiten hablar de una escena guayaquileña sólida y con público fiel y pendiente.
El festival, organizado por gestores independientes, se realizará el 24, 25 y 26 de junio, en el Palacio de Cristal. O sea, justo cuando acabe el calorsísimo del invierno costeño. Su cóctel revuelve varias artes y forma una propuesta interdisciplinaria que raras veces se ve en ciudades como el Manso.
Incluye un cartel musical con dos bandas internacionales y 10 bandas nacionales, además de ocho propuestas en artes visuales y la presentación de cinco proyectos de artes escénicas. Además, tendrá su feriecilla de emprendimientos y abrirá una plazoleta gastronómica para chefs independientes.
El cartel fue revelado apenas hace unos días, el 7 de mayo, pero materializarlo les ha tomado cerca de dos años. Un día, Catalina Reyes, José Miguel Rohon y Pancho Feraud decidieron que iban a llevar hasta las últimas consecuencias la idea de hacer algo importante para el arte. Pancho, músico y gestor, con un par de Festivalitos y decenas de “Mañana es Lunes” en el bolsillo, se unió a ese sueño compartido con los otros dos gestores y empezaron a buscar quién pueda ayudarlos a levantar la propuesta.
Además de experiencia tenían convicciones claras y una de esas era la de remunerar a todos los artistas participantes. “Hicimos contratos e incluso financiamos proyectos de artes visuales que no se han hecho. Es esta nuestra propuesta primordial”, según Catalina.
Las entradas cuestan actualmente $25 para los cuatro días. Si te preguntas cuál es la razón del precio tan accesible, pues se debe a la participación de dos auspiciantes mayores en el financiamiento del Funka Fest: El Municipio de Guayaquil y la Empresa de Turismo y de Promoción Cívica. “Gloria Gallardo (presidenta de la Empresa de Turismo) se dio cuenta de que era el momento ideal para hacer algo con jóvenes y que tuviera implicaciones importantes”, cuenta Catalina.
El equipo del evento es amplio y repleto de profesionales. Los organizadores quisieron hacer una selección de los artistas diferente a la de escogerlos por azar, o por gustos personales o por likes de Facebook. En diciembre de 2015, levantaron la convocatoria para las tres áreas: Música, artes visuales y artes escénicas y con ellas, un grupo pro de curadores entre los que se encuentran Alex Alvear –músico de Quito-, Mirella Carbone –bailarina y coreógrafa de Perú-, Pilar Estrada –curadora de arte y gestora de Guayaquil-, y más.
A la convocatoria se sumaron algunos cientos de participantes ¡hasta de Nigeria dijeron que hubo!: Más de 100 aplicaciones para música, más de 120 para artes visuales y más de 20 para artes escénicas.
En un contexto en el que hay conciertos todas las semanas, hay un público que quiere pagar por ver a sus artistas favoritos, hay espacios públicos disponibles y hay quienes están dispuestos a organizarlo todo así tome años, el Funka Fest tiene razones suficientes para nacer y poner a mover a Guayaquil. Entonces, Guayaquil, muévase y el resto de Ecuador, acompáñela.