La primera serie animada del Ecuador sobre sexo llega a destapar, y de ser posible, cumplir hasta tu última, más profunda y oscura fantasía sexual.
The Fantastic Sex Shop es la primera serie animada ecuatoriana que busca y rebusca en el baúl de lo prohibido del ecuatoriano. Y saca los trapos sucios al aire para mostrarnos que el sexo está bien, pero puede ser mejor. Cada enero, apenas se deja de promocionar el calzón amarillo de año nuevo, revistas, televisión, Facebook, Instagram, y hasta tu conciencia se llenan de publicidad de lencería, cenas románticas, y la escapada traviesa a cualquier hotel convenientemente en las afueras de la ciudad.
¿Por qué? Porque si el sexo vende todos los días, en San Valentín se vende solo. Y cerca de esta fecha buscamos a quién venda sexo, pero no como el gringo dueño de Hallmark, sino alguien del otro lado, más chévere, más inclusivo, más consciente. En eso, nos encontramos a Daniel Jácome, creador de la serie, quien la tiene clarísima. Su propuesta súper sensual/sexual nos busca para vendernos justo eso, sexo, pero visto bajo la lupa que todos han fallado en darnos: la razón.
El sexo en el Ecuador se lo vive como una práctica cuasi demoniaca a base de la tradición oral, compartida entre susurros en los pasillos del colegio, rezos a los santos de la anticoncepción. Mitos del agua de calzón, y leyendas de embarazos que juran ser Virgen María style.
El estudio de animación Alicia Animation puso sobre sus hombros la pesadísima responsabilidad de desmitificar los tabúes y mitos que nos acompañan a ricos y pobres, guapos y feos, mainstreams y alternativos, para que todxs podamos “tener mejores relaciones sexuales”, en palabras del mismísimo Daniel. Así, la serie discurre sobre temas varios que asustan, confunden o se desconocen sobre el sexo, en todo el plan educativo, pero con la misma dosis de humor que te dio con tanto amor Rick and Morty.
The Fantastic Sex Shop narra justamente las aventuras y desaventuras de cuatro juguetes sexuales que trabajan en la tienda resolviendo todo tipo de dilemas sexuales. Polansky, el dildo reparador de dildos. Kathy, la guía de la sarta de desconcertados. Late, el condón hipocondriaco con fobia a las enfermedades de transmisión sexual. Y Rick, el muñeco travesti inflable. Esos son los personajes que dan vida a los seis episodios que se encuentran en producción al momento.
Cada episodio busca atacar un mito, creencia o falsedad alrededor de las practicas sexuales de todo tipo, bajo la guía de Arai Vela, doctora especialista en medicina sexual. Lejos de invalidar los modos de vivir la sexualidad, la serie busca mostrar cuáles son las maneras más seguras, placenteras y responsables de tener sexo en toda su esplendorosa variedad.
Los inicios del proyecto datan de las épocas arcaicas de 2015. Cuando el proyecto pegó un acelerón hacia la presentación del pitch en dos instancias internacionales en las que Alicia Animation depositó toda su fe y confianza. Tras descubrir que al proyecto le faltaba desarrollo y sustento científico, se involucró la doctora Vela para dar más forma a las historias. Con una merecida reformulación, The Fantastic Sex Shop tocó la puerta del Instituto de Cine y Creación Audiovisual de Ecuador (ICCA) y se hizo acreedor al premio gordo de los fondos de producción bajo el compromiso de producir seis episodios.
Con esta inyección de capital, oportuna pero limitada, los seis guiones se sometieron a corte y confección con un estudio de producción de animación chileno, LUNES. Ahora mismo, mientras tú aprovechas al máximo tu 14 de febrero leyéndonos, el equipo de Alicia Animation está dando vida el primer guión. Pista: el primer episodio va de bolas chinas.
Este año se espera lanzar los seis primeros episodios en software libre —es decir, gratis como te gusta, de Ecuador para el mundo— y continuar con el desarrollo de nuevos episodios paralelamente. Para el lanzamiento oficial del proyecto, Daniel Jácome tiene pensada toda una plataforma de servicios que lo acompañan. Por un lado, cada episodio termina con un call to action que lleva a un landing page con la información cruda y dura respecto al tema que se trató en el episodio, para dar mayor sustento científico respecto a los riesgos, prácticas saludables, precauciones, etc.
Igualmente, en este espacio se piensa incluir la venta de kits sexuales según las practicas, creando, como lo llama Daniel, “todo el universo de The Fantastic Sex Shop.” Siendo que la serie en sí no tiene una intención de lucro, el proyecto mira con ojos prometedores hacia esta área para la generación de recursos. “Pensamos hacer juguetes que son como una especie de Señor Carepapa, que tiene toda la caracterización, y el rato de usar le quitas la cabecita, los ojitos, el no sé qué…”, cuenta Daniel.
Entonces, si tenías pensado adquirir algún juguete este mes del amor, la sugerencia es que esperes un poquito para poder comprar uno que puedas poner en el velador sin miedo ni temor.
¿Qué puedes hacer entre este hoy y la fecha de lanzamiento? No impacientarte. Si eres un animador ultra genio, contáctate con Alicia Animation: te están buscando. Si no, Daniel Jácome te tiene los mejores tips para este fin de semana que tanto llama a destapar tabúes. Freud ya nos dijo que todxs tenemos guardado bajo siete llaves una lista negra de las fantasías sexuales más oscuras y cochambrosas.
No tenía muchas pruebas sobre esto, pero tampoco dudas. Tampoco las tiene Daniel, cuando nos recomienda que este 14 “se habra un espacio (…) donde puedas confesar tus más bajas fantasías.” O también, puedes esperar a que The Fantastic Sex Shop las descubra por ti.