El Hombre Pez está de visita

Ese hombre de torso descubierto y ojos desequilibrados con delineador no es Sebastián Game siempre. Cada vez que se sube al escenario encarna al ser en el que quiso convertirse para expulsar su discurso y contar historias extrañas. Aquí o en Santiago de Chile, el Hombre Pez tomó ventaja de una vida entera de música y bajo un sello legendario está a punto de lanzar su disco físico. Lo quiso hacer en Ecuador, ‘sacando el diablo’ junto a sus músicos predilectos, aunque el presente marque Chile como punto de partida de su proyecto.

Fotograma del video de su tema «Hombre Pez»

Sebastián Game dejó su pasado de Biorn Borg, Los Nietos, Almohada o Alma Rasta suspedido en la altitud quiteña y se permitió comerse el mundo desde Santiago, una ciudad grande, con industria musical, donde con ese u otros proyectos empezó a vivir de la música. Empezando de cero. Sin ser nadie. “Uno aprende un montón de cosas. Se da cuenta de que todas las personas tenemos algo valorable y que en realidad todos valemos verga, también. Es rico ser una miga en algo súper grande”.

Pero Hombre Pez no nació allá ni ha estado aislado de Ecuador. Cuando aún vivía aquí, aparte de tocar la guitarra en sus otras bandas, daba vida a este proyecto paralelo. Se ponía la piel de cíclido y daba protagonismo a su alterego, tomándose también el micrófono y la composición de las letras. Cómplices de su lado pez, siempre han sido el baterista Bastián Napolitano, Santiago Pages y su bajo, Camila Terán y Jennifer Byron.

Los humanos ya no son tan amigables

“Justo cuando empecé a darle fuerza, me fui. Entonces seguí desarrollándola en Santiago. Cuando llegué estaba viviendo en un lugar que funcionaba como casa ocupa y me empecé a ligar al movimiento más subterráneo de la ciudad”. Mucho punk y muchas cosas por el estilo, influenciaron a Game, aunque su propuesta era la más ‘pop’ entre todas las de esa movida de la que empezó a ser parte.

Por ahí conoció al dueño del clásico sello de punk chileno CFA, y esa se convirtió, luego de varios tragos y conversaciones, en su plataforma para lanzar el disco “Los humanos ya no son tan amigables”. Este LP es el álbum primo de Game. Una compilación de temas viejos y nuevos que concentran el sonido de base rocknroll, con una esencia punk y psicodélica muy fuerte.

Portada del disco «Los humanos ya no son tan amigables»

Once canciones reviven el caos y la absurda cotidianidad en la que está sumida toda una generación. Político sin decirse político, arrebata con riffs enfáticos y coros femeninos dominantes, la epifanía de estar cerca de los treinta, haciendo música, viviendo a contraluz. Querías probar algo de estas venas, juventud delirante extrema. El instinto de superivencia, un hilo fino contra la decencia.

En un culto por mostrar lo que hizo sin la venia de nadie, con su teatralidad habitual sobre el escenario y ‘sacando el diablo’, este sábado tocó en una tarima en el Ilaló el repertorio denso de su disco. Reprendió sin miedo a los malcriados, gritó, puteó y confirmó –como siempre, con el pecho descubierto y la guitarra bien afinada- que el Hombre Pez existe.

Hombre Pez en «Saca el Diablo» Fest / Foto: Marissa Rodríguez

Para descargar/escuchar el disco, pueden entrar aquí.

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