Despidiendo a bell hooks: ícono feminista, antirracista y anticapitalista

por Constanza Puente
bell hooks murió el 15 de diciembre del 2021, en su casa en Hopkinsville, Kentucky, a los 69 años. Este es un homenaje y un pequeño repaso por su obra.

Hoy, y mientras hoy sea siempre, es cuando los aportes de bell hooks ante una sociedad patriarcal, racista y clasista importan y resuenan en nuestra coyuntura social. Por ello, despedirla con este texto, es a mi parecer no solo un homenaje a una mujer negra, activista y autora de alrededor de 40 textos críticos, sino también un acto necesario para promover la consciencia social y el cambio estructural en discriminación, desigualdad y género. 

bell hooks nació en Hopkinsville, Kentucky, al sur de Estados Unidos, en el año 1952 . En aquellos años regían las leyes Jim Crow, las cuales legalizaban a nivel local y estatal la segregación racial. Nació bajo el nombre de Gloria Jean Watkins, pero utilizó bell hooks para referirse a sí misma en sus obras y ante el medio como símbolo de su pensamiento. Se escribe en minúsculas para resaltar que lo más importante son sus ideas, no su persona. Además, éste es parte del nombre de su bisabuela materna, y una forma de honrar a sus antepasadas quienes sobrevivieron al esclavismo, la supremacía blanca y la violencia y desigualdad de género, cuyas bases permanecen hasta hoy. bell fue una feminista, académica y profesora afroamericana de las más importantes para Estados Unidos y el mundo, aunque el nacionalismo no era de su agrado y es parte de su crítica social y cultural. 

Su obra

Por dónde empezar a hablar de sus aportes es un lugar difícil, su extensa obra lo provoca y la complejidad de la misma también. Además, de ninguna manera me siento demasiado indicada para hablar sobre bell y su pensamiento. Sin embargo, algo es claro y fundamental para mí en las ideas que nos dejó bell hooks y es el entender que el feminismo blanco es excluyente de las mujeres negras, trans, empobrecidas y racializadas. Que éste, sigue funcionando como mecanismo de opresión de las mismas y que existe para privilegiar a las mujeres blancas, que a su vez, se benefician y benefician a un sistema violento y discriminatorio como el capitalismo. 

Un feminismo sin que la supremacía blanca (término que bell prefería usar sobre racismo) y el clasismo lo atraviesen como problemáticas esenciales, es un feminismo vacío, que no se dirige hacia los puntos clave de los sistemas de opresión y violencia a los que se enfrentan las mujeres negras, racializadas y las mujeres en general. Todo esto sin dejar a un lado el capitalismo, como un sistema político y económico que se sostiene en base a la opresión y empobrecimiento de las personas negras. Desde este posicionamiento escribió obras como Talking back: thinking feminist, thinking black (1989) donde ya hablaba sobre colonialismo y supremacía blanca y Feminism is for everybody: passionate politics (2000) en la cual aborda también la homofobia y la masculinidad. 

Creo que lo radical de bell hooks (y utilizo radical como una palabra enteramente positiva) es justamente que su feminismo no se centra únicamente en la superficialidad de la búsqueda de la igualdad de género, sino en erradicar el sexismo y los sistemas de opresión racial, de clase y género. bell practicaba lo que predicaba y aquello es lo que transmitió a sus alumnos; en su libro Enseñar a transgredir, la educación como práctica de la libertad (1994) resaltó la importancia de enseñar a desobedecer y transgredir las imposiciones sexuales, raciales, de clase y género por ser la manera más efectiva de generar un cambio colectivo profundo.

Además, bell rechazó en su práctica educacional la manera tradicional de hacerlo, incentivando al estudiante a tener pensamiento crítico, y a su vez, rechazó los formatos académicos clásicos instando a romper con el elitismo intelectual, pero sin dejar a un lado la importancia de teorizar desde la negritud. 

bell expandió y profundizó en el feminismo interseccional, (antes de que el término fuera acuñado por Kimberlé Crenshaw en 1989),  en su libro Ain´t I a woman?: Black women and feminisim (1981), donde escribió: “en vez de resignarme a esa apropiación, yo decido reapropiarme del término feminismo, y enfocarme en el hecho de que ser feminista de forma auténtica es querer que todas las personas, mujeres y hombres, se liberen de los roles sexistas de dominación y opresión”

bell hooks nunca dejó de cuestionarse, cuestionar y mejorar su teoría. La crítica y la construcción de la masculinidad es otro eje central de su obra en La voluntad de cambiar del año 2004. bell nos permitió entender cómo el patriarcado afecta a los hombres también, quienes se enfrentan a mandatos en los que su salud emocional se ve perjudicada, así como su carácter. Los hombres entienden su valor sólo a través de lo que hacen y de lo que dominan, así también entienden el amor, y esto afecta profundamente su felicidad, sus relaciones, la violencia y el poder que ejercen sobre otros. En la obra, destaca la importancia de que los hombres asuman responsabilidad y empiecen a entender los efectos nocivos del patriarcado en sus vidas y actúen, problematizando, teorizando y cambiando desde su lugar de pronunciación y experiencia. 

Siempre actual,  bell escribió un ensayo en el 2016 en el que critica el álbum ‘Lemonade’ de Beyoncé. Para ella, el álbum es un negocio capitalista en el que destaca el hecho de que las mujeres no deben utilizar las normas del patriarcado a su supuesto favor cuando en realidad favorece al capitalismo que mantiene la opresión sistemática del otre. Además, destaca que el álbum en su concepto y mensaje no permite que los hombres sean conscientes del trabajo que tienen que realizar ellos para cambiar la realidad de violencia ejercida contra la mujer y que, al contrario, se convierte solo en una expresión del dolor de las mujeres.

Sobre el amor, bell también nos dejó grandes lecciones

Si todas sus ideas son revolucionarias, sus obras sobre el amor lo son de manera excepcional, pues el amor es revolucionario en sí, como bell mismo sostenía. En su texto, Todo sobre el amor del año 2000, cuestiona el amor romántico y el concepto de amor atravesado por el patriarcado y socializado en nuestras infancias.

Todxs hemos crecido con la idea de un amor fracturado por el machismo, la dominación, la explotación, el abuso y la posesión. En definitiva, un amor capitalista y patriarcal que nos consume, nos hace consumir al otro y mantiene las estructuras de opresión y violencia patriarcal. En relación a esto, bell sumó de manera sustancial a la teoría queer y ella se identificaba como tal. Fue una contribución crucial desde su práctica y teoría, pues ella enmarcaba lo queer de manera que erradique el patriarcado y el capitalismo dentro de las dinámicas e identidades gay.  Así también se logra deconstruir el amor romántico en este ámbito de la vida de las personas no heterosexuales pero todavía heteronormadas. 

Para bell, el amor no es un sustantivo sino un verbo, algo que se practica y se mejora, un arte profundamente político. “En el momento en que elegimos amar, comenzamos a movernos contra la dominación, contra la opresión. En el momento en que elegimos amar, comenzamos a avanzar hacia la libertad, a actuar de manera que nos libere a nosotros mismos y a los demás” escribió bell  y nos ayudó a cambiar lo que normalizábamos y aceptábamos como amor, los ciclos de violencia en los que nos hundíamos sin saberlo; nos introdujo por el camino de empezar a deconstruir nuestras ideas sobre lo que es amar y empezar a entender esta acción como una fuente revolucionaria ante las injusticias sociales y como un camino hacia la libertad. 

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Lo dicho no es suficiente para dilucidar todo lo que dejó bell hooks y honrar su existencia. Leer su obra con apertura sí lo es y es lo que bell nos invitaría a hacer. Hay que empezar a hacerlo con humildad, asumiendo aquello que todavía debemos cambiar de manera activa, aquello que todavía tenemos que transgredir, aquello que todavía tenemos que escuchar y dar paso a quienes desde su experiencia pueden y deben tener los espacios de denuncia y pronunciamiento. 

bell hooks nos dejó el miércoles 15 de diciembre a los 69 años, en su lugar de nacimiento y en el lugar en el que decidió morir, acto importante para ella. Nos dejó con muchos regalos que abrir, su existencia misma fue un regalo, una liberación para los suyos, para nosotras, para todes.

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