El Cuarteto de Nos llega a Ecuador el 1 y 2 de abril, como parte de su gira Un Jueves Raro. Roberto Musso, vocalista de la banda, nos cuenta detalles de lo que se viene.
La pandemia nos dejó con los churos hechos. Ya con las entradas en la mano y todo el show organizado, en 2020 tuvimos que lamentar la cancelación del concierto del Cuarteto en la capital ecuatoriana. Dos años después, ¡tenemos buenas noticias!
El Cuarteto de Nos, que nació en Uruguay a mediados de los 80s, se ha consolidado como una de las bandas más icónicas de rock para el mundo hispanohablante. Su búsqueda de nuevas sonoridades, así como su concepto irreverente, los mantiene vigente para cualquier público. Con más de 30 años en escena, existe una constante comunión con sus seguidores. “Quizá el 80% del público es menor de 25 años”, dice Roberto Musso, vocalista de la banda.
¡Vuelven a Ecuador! El próximo viernes 1 de abril tocarán en Cuenca y el sábado 2, en Quito. Esto como parte de su gira Un Jueves Raro que “tiene muchas canciones del álbum Jueves, muchas canciones del álbum Raro, también las perlitas que hay por ahí diseminadas entre los dos discos, y los dos últimos estrenos”, explica Musso. El tour incluye shows en Panamá, Costa Rica, Ecuador, Perú, Argentina y Uruguay.
Hablamos con Roberto Musso para conocer más de lo que se viene.
***
¿Qué puede esperar el público de esta gira?
El público se va a encontrar con un show diferente. Llegamos con un montón de canciones de “Jueves” que no las hemos tocado en vivo aún en Ecuador. Tenemos también estos dos estrenos, la Fiesta en lo del Dr. Hermes y La Ciudad Sin Alma. Además, el plus de un montón de canciones de “Raro”.
Es un show con mucha emotividad de casi dos horas, pero que se van volando. La gente lo vivirá de principio a fin con mucha alegría y participación.
Lo que nos gusta mucho, sobre todo en el teatro en el que va a ser en Quito, es que la gente va a poder apreciar mucho más que en lugares que pueden ser más multitudinarios. La gente disfrutará la parte de escenificación y puesta en escena.
¿Cuál es el cambio entre la gira que iba a pasar en 2020 y la que va a suceder ahora?
Yo creo que es un cambio positivo. La gente que compró la entrada salió ganando al final porque la verdad es que el repertorio se ha extendido un poquito más. Nosotros siempre tratamos de varios los shows para las ciudades a las cuales vamos más seguido, y en este caso, se armó un show muy interesante.
Este es un show con la energía muy alta durante el 100% de las canciones, que recorre una trayectoria interesante de la banda durante los últimos años.
¿Qué integrantes son los que vienen a los conciertos de Ecuador?
Vamos el cuarteto estable, que es el cuarteto de cinco, la alineación de siempre. Hace 12 años que estamos con los mismos integrantes (Roberto Musso, Santiago Tavella, Alvaro Pintos, Santiago Marrero, Gustavo Topo Antuña).
Obviamente también con todo el equipo técnico que siempre nos acompaña con las pantallas, con las sorpresas y con toda la parte actuada de las canciones del Cuarteto, que siempre están presentes.
¿Cómo vivió la banda la pandemia?
Fue muy difícil a nivel de toda la banda. Somos un grupo muy grande, además de los músicos que viajamos está el equipo técnico y de producción, esa otra gente lo sufrió mucho más que nosotros por la parte económica.
Somos una banda que tocamos mucho en vivo. En ese aspecto se notó muchísimo más el hecho de estar alejados de los escenarios. Con la pandemia no sabíamos cuánto debíamos esperar, ni cuándo íbamos a volver a los shows.
Por suerte, pudimos canalizar el tema de la creatividad y aprovechamos para hacer canciones, que no sabíamos cuándo podríamos volver a tocarlas. Por más que el disco Jueves era muy jóven, porque tenía unos poquitos meses, nos dedicamos a hacer canciones que son las que van a ver la luz ahora en este año.
¿Cómo han sido sus experiencias previas en Ecuador?
Nos acordábamos la primera vez que venimos en 2008, a El Aguijón, que era un lugar emblemático rockero de aquel momento y que nos fue a ver muy poca gente. Pero, a medida que fuimos volviendo, se fue multiplicando y multiplicando, y ahora estamos en un aforo de casi 10 veces más gente de la que había en aquel momento.
También me acuerdo que Quito fue el primer contacto que tuvimos como artistas con la altura. Yo sentía cómo me costaban tanto las canciones más rapeadas. Con el tiempo nos fuimos acostumbrando y ya es un hecho que es anecdótico.
Tanto Quito, como Cuenca y Guayaquil, que son las ciudades que hemos conocido en Ecuador, nos han recibido siempre con muchísimo cariño. Y esa efervescencia que pone la gente en las canciones a veces no se encuentran tanto en Uruguay. Es una experiencia que tenemos muchas ganas de repetir pronto.
Se ha hablado de un nuevo disco para este 2022, ¿qué se viene?
Hemos sacado un par de singles que son un adelanto del disco que tenemos planeado para julio. Es un disco que nació con la incertidumbre de la pandemia pero que lo terminamos grabando en Montevideo el año pasado, con la producción de algunas canciones con Eduardo Cabra, conocido como Visitante, de Calle 13. También con Héctor Castillo, otro productor con el cual ya hemos trabajado anteriormente.
La idea es sacar algún single más el mes que viene. Pero el disco nuevo, calculo que se viene para julio-agosto, y que nos lleve nuevamente de gira, presentándolo.
Fun Fact: Cuéntame sobre la inspiración musical de la banda en sus inicios…
Nosotros nos conocimos muy de jovencitos. Estábamos entrando a la secundaria y nos conocimos por nuestras habilidades musicales, que en aquel momento era el Rock Anglo sobre todo, éramos fanáticos de los Beatles.
Nos encantaba tanto la temática musical como lírica, y también cómo escuchas discos de diferentes años y parece que es otra banda diferente. Eso lo llevamos mucho en el ADN de Cuarteto, eso de estar investigando y buscando sonoridades nuevas. A veces parece que somos varias bandas en una sola, creo que es muy beatlero eso.
Empezamos tocando cover de bandas como Led Zeppelin, Deep Purple, Rolling Stones; esa es la música que nos gustaba. Después fuimos creciendo y a mí me interesó mucho la parte del rap, hip hop, y cómo poderlo enganchar con la parte rockera. Yo creo que toda esa fusión ha ido germinando a lo largo de la historia del Cuartero.