Devoto es el álbum más reciente del artista cuencano Matías Salazar, conocido como Humano. La experimentación electrónica enriquecida con los elementos sonoros de sus travesías y vivencias conforman su propuesta musical.
En 2017, el artista cuencano Matías Salazar se convirtió en Humano. Pero no en uno cualquiera, sino en uno que busca entender “por qué estamos aquí”. Su vinculación musical de toda la vida, su recorrido como percusionista y la incursión en la experimentación electrónica dieron forma a un proyecto que indagaría sus experiencias, sensibilidades y devociones personales.
La materialización de su música no se da como un producto premeditado. Humano más bien se deja vivir, sentir, y enseñar de las experiencias para después hacer de ello la materia prima de su obra. Es así como Devoto, su álbum reciente, vio la luz tras un proceso de un año y medio de duración.
Devoto, dice el artista, es el trabajo más fuerte en su carrera personal. En este habla de Matías Salazar desde un ámbito íntimo que al final puede ser mostrado al público. Su propuesta musical es una indagación en la grabación y experimentación electrónica enriquecida de los elementos sonoros de sus travesías y vivencias.
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Un álbum travesía
Como un extenso viaje por Latinoamérica, este disco de 11 canciones recoge valores de varias culturas, así como de la música de raíz para ser instalados sobre su base de composición electrónica. Cada canción resulta, de hecho, un fragmento del macro-viaje que bien podría ser contada de forma aislada, con sus propias anécdotas y aventuras, pero sin dejar de formar parte fundamental de la travesía mayor.
Conforme se recorre el álbum se descubre la diversidad que existe en él. Desde instrumentos andinos hasta samples y bases rítmicas de música global como la salsa, el rap o el pop conforman esta propuesta. “Es un concepto de nuevas emociones, de nuevos sentimientos, de poder sentir devoción a lo que me hace ser lo que soy y de cómo me muestro a las personas”, explica.
Creo en la luz que me despierta
Creo en el tiempo que me queda
Creo que es el último día
Creo en tus ojos que me miran
Creo en el poder del sol
En las olas que me llevan
Que el amor es religión,
salvación en la tormenta.
Letra de “Devoción – 2021 versión”, segundo tema del álbum interpretado por Nathalia Madrigal (a.k.a Juana Monk). Es la canción madre del disco.
El sentido de devoción
Dentro de su autoidentificación irreligiosa, Matías encontró en este nuevo trabajo el espacio para expresar valores e intenciones de apreciación y de culto. “Uno puede ser devoto a muchas cosas. Como en mi caso a nuevas actitudes, a crecer, a conocer. Devoto a su espacio, a su casa, a su familia, fiel a algo que le hace feliz, a lo que le llena”, dice. Las ceremonias y danzas ancestrales de la región fungen como inspiración importante.
El sentido de devoción se encuentra también dirigido hacia la naturaleza. El honor a ella se hace presente en las letras, nombres de canciones (“Camomila”, “Otorongo”) y hasta en la portada. La gráfica del disco refleja la intención de “expresar que el humano puede intentar ser el centro de atención, pero queda diminuto cuando se enfrenta a la naturaleza”, reflexiona.
La colaboración hace parte fundamental del álbum. La presencia de Madrigal, Sasa Fresno, Curandeira, Método y Huaira son apenas algunos de los nombres visibles, pues intervinieron más de 12 músicos entre instrumentistas, investigadores y colaboradores. Es curioso y cabe mencionar que algunas de las personas que colaboraron no se conocían con Humano antes del disco. Fue esta la oportunidad de llevar a cabo relaciones como parte del mismo proceso de creación.
“Hacer música es importante, pero para quien quiera dedicarse a esto también lo es el estar pendiente del music business”, expresa el artista. Conocer gente y colaborar le resulta valioso en cuanto a la intención de elevar mutuamente su nivel musical. En ese aspecto para Humano ha sido favorable el tráfico cruzado entre públicos de los diferentes artistas que formaron parte del álbum.
Por último
¿Y ahora qué? “Ya se viene lo bueno”, dice Humano con satisfacción y alivio, pues para dentro de pocas semanas, ya tiene planificada una gira presencial en Ecuador:
– 13 de noviembre en Quito
– 2 diciembre en Guayaquil
– 3 diciembre en Cuenca
– 4 diciembre en Loja
También tiene algunas expectativas para el próximo año como la posibilidad de una gira por Buenos Aires y poder sacar el disco en vinilo. El álbum, bajo el sello de la disquera argentina Fertil Discos, está disponible en YouTube y en Spotify.