Death, black e industrial. Ésos son son los sonidos pesados que encontrarás en esta lista cargada de pura crudeza. Pon a prueba tus oídos con ella.
1. Author & Punisher / Álbum: Beastland
Hace algunos años, en mis listas de favoritos del año, incluí un disco industrial que te dejaba sabor metálico en la boca. Era tan marcado y potente que se percibía la fuerza que dejaba cada abrasiva canción en el ambiente. Me refiero a “Melk En Honing”, álbum lanzado en 2015, que fue mi primer acercamiento a A&P. Sin duda, la impresión fue en aumento al ver todo lo que había detrás de las creaciones de Tristan Shone, la mente maligna en todo esto.
Ingeniero con un grado en robótica, usó sus poco comunes conocimientos para crear una serie de máquinas llamadas “dub machines”. Unidas cual traje de guerra del futuro al cuerpo de Shone, producen peculiares y manufacturados sonidos.
Como si fuera una línea de ensamblaje de placas metálicas para dar vida a una canción, el sonido de A&P mantiene mucho de los orígenes del industrial más crudo de los 80s. Es decir, aquello de utilizar sierras, martillos y cualquier manera de producir distorsión pesada, pero con lo último de la tecnología.
La sensibilidad melódica es siempre agresiva en cada uno de los temas, y a pesar de lo crudo y descorazonado del sonido, siempre me parece innovador en cada uno de sus discos. Una fusión de terror entre hombre y máquina.
2. Behemoth / Álbum: I Loved You At Your Darkest
Entender el concepto de blasfemia que Behemoth mantiene día a día como bandera y fuerza musical, es adentrarse en su historia, su cultura, su política y sus profundas raíces polacas católicas. Y, también, en cada canción: arrancarlas de raíz, exponerlas y hacerlas sangrar.
Como fuerza creativa de un movimiento controversial, azaroso ante todo lo que significan estas costumbres, los polacos han tenido que batallar por mucho tiempo ante todas las instituciones que rigen los estamentos de “sociedad, tradición y familia”. Esto los ha expuesto, poco a poco, y cada vez más, ante los medios. Así, la banda ha profundizado en su filosofía telémica, anticristiana, satanista, sin dejar de lado la modernidad y el día a día de los estamentos que mantienen el mundo occidental.
A pesar de haber dejado el underground y acarrear toda esta fama, lo que a la final cuenta es que, musicalmente, la geometría de ILYAYD es perfecta. Hay canciones elaboradas a la manera más tradicional del black death metal, odas pesadas como ritos, metal atmosférico y un sinnúmero de ejecuciones que dan vida, muerte y resurrección a un gran disco.
A la final, para muchos, la imaginería y excesiva exposición puede llegar a saturar. Para otros, simplemente es disfrutar de buena música bien elaborada.
3. Bosse-de-Nage / Album: Further Still
Otra banda que repite en mis discos favoritos del mes son los nativos de San Francisco, Bosse-de-Nage, los cuales, con un sonido que mezcla post-hardcore y black metal, son parte de la reciente ola de llevar la agresividad de dos géneros diversos a niveles nuevos de búsqueda de espacios e identificación.
Tratando de sobrepasar el sonido más áspero y oscuro del black metal, los momentos en que un continuo blast beat se junta con vocales hardcore marcan las partes más comunes de Further Still. Principalmente buscan alejarse de elaborados pasajes atmosféricos o de orquestaciones. Este disco toma lo directo del hardcore ochentero y lo hace crujir. Incluso por el tiempo que dura cada tema (aproximadamente cinco minutos) nos damos cuenta de que este disco es una sola herida directa, sin necesidad de irse por las ramas.
Algo muy rescatable es la calidad de la instrumentación, para no saturar. Como siempre, en un disco que llega de frente a tus sentidos se puede inferir si ésta no es correcta, o si, creativamente, pese a ahogar o abusar de los riffs más pesados, es escuchable y digerible. Lo que posiblemente afecte esta misma virtud es que la composición puede sonar, en varios pasajes, algo monótona y poco memorable. Pero es algo menor si se presta atención al disco y si se intenta descubrir el proceso de transmisión y entrega de cada canción.