Cinco temas sobre Guayaquil y sus desventuras

por Pablo Dávalos
Hoy se celebra la independencia de Guayaquil, y para conmemorar sus 198 años como ciudad libre y soberana, hemos preparado una lista de canciones que hablan de la «Perla del Pacífico».

Guayaquil

A continuación, las letras de las canciones son desmenuzadas para saber qué quiso decir cada banda a la ciudad más furiosa del Ecuador.

Lolabúm – Guayaquil Ticy

“El calor, el calor, el calor, me va a matar”

Es la novena canción del disco debut de Lolabúm, «El cielo», que salió en 2016. Pedro, el líder de la banda, vive en Guayaquil a diferencia del resto de integrantes, quienes viven en Quito. Esto ha ocurrido porque él estudia en la Universidad de las Artes.

A simple vista, puede que este tema hable sobre las incomodidades de tener que irse a una ciudad de la Costa cuando eres serrano, pero puede que también tenga un significado más profundo. La canción empieza diciendo «córtame los pies», y luego dice «méteme en tu cama», probablemente una alusión a no querer irse de Quito y dejar un amor atrás. Se entiende así porque la frase siguiente da señales melancolía al decir «cómo extraño tus ojos al sol«.

La canción continúa repitiendo «el calor me va a matar» al menos cuatro veces hasta el final, aunque pueden ser más, según cómo las cuentes. Por ahí dice «se me derriten las manos», porque para alguien que no había vivido allí antes, la temperatura y humedad hacen un clima casi insoportable.

 Mano Negra – Guayaquil City

“Guayaquil City va a reventar”

La undécima canción del disco «Puta’s Fever», de Mano Negra, la banda de Manu Chao, ya tiene casi 30 años desde que salió. Tanto el álbum como la canción se publicaron en 1989. Ésta fue compuesta por Manu Chao tras su paso por la ciudad.

Con esta canción, la banda francesa logró captar la esencia de la ciudad. Las letras empiezan diciendo «Guayaquil City va a reventar, tanto calor no se puede aguantar», lo que no resulta raro, pues cada extranjero que pasa por la ciudad hace eco de las altas temperaturas. Pero con eso de que va a reventar puede que no se esté haciendo referencia sólo al calor, sino al hecho de que, para la época, Guayaquil sí era casi como una bomba.

Luego, la canción continúa en una suerte de diálogo, contando varias episodios de la vida cotidiana. «¿Qué pasa por la calle?», pregunta Manu Chao. «Nada, no pasa nada», le responden. Pero lo cierto es que pasaba mucho. Al líder del sindicato de la protesta lo mataron, el hijo de «La Terremoto» se mató en su moto. Se habla del colombiano engañoso y del «sueño peruano», y se invita a enredarse en este último. «Guayaquil City gonna kill you baby», dice dos veces la voz que interpreta canción, quizás por la ferocidad de vivir en una ciudad descontrolada.

Como dato curioso podemos mencionar que la canción fue versionada, con un tono más rockero, para la película «Sin otoño sin primavera». Víctor Andrade fue el creador de la versión y tuvo como colaborador a Carlos Bohórquez.

Rocola Bacalao – Guayaquil City

“Yo me voy al nivel del mar”

Décima canción de «Gases Nobles y Metales Pesados», el último disco que compuso la banda quiteña, y cuyo lanzamiento fue en 2013. La canción habla de un quiteño despechado que huye de su ciudad para curar sus penas al nivel del mar.

La versatilidad de Rocola Bacalao les permitió a sus miembros experimentar con la guajira para hacer una de las canciones más emblemáticas sobre la ciudad. Como en otras canciones de esta lista, se trata de un serrano yendo a la ciudad del litoral. Empieza con la frase «Desde que me dejaste por ese gil». La diferencia es que, en este caso, el «manso» es la salvación para desahogar las penas. Este sujeto asegura no volver a Quito, que mejor se desquita en Guayaquil, y que a la orilla del río ya no siente el frío.

Hay dos referencias curiosas dentro de la letra de la canción. La primera recoge una frase de la canción de Mano Negra, la que dice que la ciudad va a reventar. La segunda paga tributo al poema «XV», de Pablo Neruda, cuando se cacha este juego de palabras: “me gusta cuando hablas porque estoy como ausente, me gusta cuando callas porque al menos no me mientes”.

Héctor Napolitano – Guajira a Guayaquil

“Hace tiempo que quería cantarle a Guayaquil”

En esta canción, el «Viejo Napo» hace una confesión de amor y admiración a su ciudad natal. Es la primera canción de su cuarto disco como solista, “Cangrejo Criminal, que salió en 2004.

Por fin, esta vez se trata de una guayaquileño cantándole a su propia ciudad. El tema hace referencia a una serie de lugares emblemáticos de la ciudad: el cerro Santa Ana, el barrio Las Peñas, el barrio de El Astillero y el de El Carmen, donde Napolitano dice haber nacido. Le rinde homenaje a Barcelona, como el equipo más grande del Ecuador, por haber sido finalista de la Copa Libertadores. También habla del barrio de la Boca del Pozo, haciendo referencia a su archirrival, Emelec.

Luego de esto da puras señales de amor a su ciudad. Se refiere a ella como «Guayaquil la bella» , «Guayaquil la estrella», y «Guayaquil, eres perla que surgiste del más grande e ignoto mar». Su sentimiento de cariño por la ciudad es profundo, pues dice «yo le canto enmarañado», como si su corazón fuera uno de los lechuguines que flotan en el río Guayas yendo hacia el sur.

Rey Camarón – Marginal de Guayaquil

“Mi Guayaquil se encuentra bien parada”

Éste fue el primer sencillo de este artista solista, y lo publicó hace tres años (2015). Esta canción habla sobre toda esa gente menospreciada que habita la ciudad y que se encarga de darle vida a la bella Guayaquil.

El Marginal es el vendedor ambulante, el cuidador de carros, la madrina del encebollado, la prostituta de la calle Colón, el chiclero en el Malecón. Son todos marginales porque son correteados por policías municipales.

En general, la canción habla sobre las diferencias sociales que se ven en las calles de la ciudad. Para Rey Camarón, es muy diferente ser de Samborondón que de cualquier otro barrio popular. Ésta es una realidad que todos sus habitantes comparten.

YAPA: Tanque – Febres Cordero me sacó de la bahía

“Salto de la gabarra y me voy para Guayaquil”

Sexta canción del segundo disco de la banda quiteña titulado “Hasta la muerte de su titular”, que se publicó en el 2007. El tema habla sobre las represalias municipales a los informales que comerciaban en la bahía de Guayaquil.

La canción empieza con este personaje que se monta a una gabarra para ir a Guayaquil. Al llegar dice que un broder le grita “yo le vendo un maduro con cheese”, lo cual puede significar dos cosas: la primera, el típico mata-hambres de un maduro cocido con queso encima; o la segunda, el coctel de drogas que mezcla marihuana y otras sustancias.

En seguida dice que ahí viene el dueño del país, claramente el ex presidente León Febres Cordero, que para el año que salió la canción todavía seguía con vida. El verso acaba diciendo “ese olor me es conocido, se me largan de aquí”, dando la idea que el maduro del que hablaban era el que se fuma.

A todo esto, al personaje principal de la historia ya lo han sacado de la bahía y decide regresarse a su gabarra. Se encuentra con su pana el tribilín que le brinda un chance de mercancía que ha traído de Manabí. “Maldita leona, oye a cuento el manicris”, le pregunta el protagonista, y con eso estamos seguro que antes estaba fumando. “Maldito León, este también es mi país” dice, antes de volver al coro y gritar “Febres cordero me sacó de la bahía”.

Únete a la conversación

Tal vez te interese