Esto no es un ranking, esto no es la última palabra. Escribimos sobre los discos que nos gustan y les contamos por qué deberían ponerle oreja incluso cuando crucemos al 2017.
Esta es una lista totalmente subjetiva. Los radiococoas apuntan a su disco preferido y lo reseñan para ustedes. Este año hubo música para todos, algo que nos dejó pensando también qué tan memorable fue la producción de 2016 en este país tan pequeñito. Si quieren descubrir algunas perlas de la música local, sigan leyendo esta nota, escuchen con oreja fina y encuentren la gracia que nos traen los sonidos nuevos, y en particular los que están tan cerca nuestro, los que podemos ver en vivo con frecuencia y que muchos hemos visto crecer, mutar, renacer y transformarse. ¡Como la vida misma!
Jalea
El General Villamil
Por Jesús Felipe Jarrín
Este disco tiene muchos elementos por los que tengo un gran debilidad: sonido psicodélico, ambientes surf rock y un sintetizador impredecible. Si pudiera describir el álbum con dos calificativos serían: tripeado y sabroso. Me gusta pensar que “Sasha me enseñó un nuevo baile” es una secuela directa a la canción “Sasha”. No hay nada más estimulante como artista que una canción me ayude a imaginarme una historia alrededor de ella. La fusión musical bien lograda es muy satisfactoria en una época en que todo se ha hecho. Desde sonidos chicheros hasta rock sesentero fluyen perfectamente en todas las canciones de este disco.
Verano en Coma
Da Pawn
Por Ga Robles
En 2012, empecé a escuchar Da Pawn, luego de engancharme con una de las canciones que ellos menos quieren: “Casi Siempre”, la reversión de un tema hermoso de Can Can. Para ese entonces yo no trabajaba en Radio COCOA, y mi jornada en un diario digital arrancaba tempranísimo. Era verano. Mi primero trabajando. Me levantaba, los ponía a ellos y me imaginaba paisajes en auto. Verano en Coma es la reivindicación de ese feelin’ de frescura que han estado transmitiendo todos estos años. Es la puesta en escena de un tipo de música que por etiqueta será indie, pop o rock, pero que cuando escuchamos sabemos que es Da Pawn. Este disco trae consigo más groove que el anterior, con guitarras a veces dotadas de tonalidades folk y otras más ácidas y brillantes. Para este material, la banda se apropió de un sonido sólido y producido con miras a dejar atrás la era de baja fidelidad, sin dejar el espíritu indie con el que se han identificado. La melancolía se fusiona con el juego y la balada rock sesentera, y la voz y los coros siguen teniendo el protagonismo que funge de marca de agua en el proyecto. Este disco comprobó que El Peón tiene mucho para ofrecer y los cambios le significan pasos hacia adelante. Un disco para escuchar de corrido en medio de los días de locura que avecinan el 2017.
Kariño Universo
Fabrikante La Banda Mocha
Por Juan Pablo Viteri
Tener que elegir un favorito es complicado, pero siempre hay cosas que te sorprenden de formas gratas y te hacen exclamar: ¡qué arrecho! Este año probablemente la mejor sorpresa que me llevé fue Fabrikante. Es evidente que lo tradicional es cada vez más una fuente de inspiración para los músicos independientes de la región. Sin embargo, en el caso de Kariño Universo, Fabrikante establece caminos insospechados que tejen conexiones entre lo contemporáneo y lo tradicional, generando entramados que juntan lo tecnológico con lo ancestral, mientras difumina las fronteras entre lo experimental y lo popular. Todo eso, el man solito, porque Fabrikante La Banda Mocha, además de ser banda, es un proyecto solista.
Blasfemia
Guanaco MC
Por Martín González
Los ecuatorianos vivimos nuestra vida como una blasfemia. Confundidos en medio de la mezcla del dolor del pasado con la confusión del presente, cobijados por la ilusión del futuro. Cuando vino un tal Humboldt y sentenció que los ecuatorianos “nos alegramos con música triste”, sintetizó sin querer nuestra esencia. No obstante, Humboldt no sabía que en medio del dolor que estrangula las tripas, en medio del sancocho espeso en que a veces nos transforma el mestizaje, está el elíxir de la fertilidad creativa. Blasfemia es sin duda uno de los discos más poderosos que han salido de nuestra tierra, uno de los más sólidos, de los que más duro le dan a las neuronas. Y lo es porque vino desde dentro, con todo lo desgarrador de la honestidad y con todo el coraje que requiere una creación artística valiosa. Los gringos tienen el término “passion project” para referirse a una obra que, en breve, le ha sacado un tajo del alma a su creador. Eso es el Blasfemia, y por eso mismo se vuelve tan crudamente universal. Solo quien expone sus adentros sin miedo puede llegarle a los adentros de los extraños a los que se expone. Guanaco MC decidió desenmascararse para hablar de las penas de Juan Pablo Cobo y lo hizo en un coctel explosivo que estruja el corazón con los dedos, sin piedad. Toda la agresividad del hip-hop clásico noventero (con esas bases de percusión que le ponen a uno a cabecear en loop infinito), tildada con el llanto de los requintos y los órganos oscuros, se juntan con una armonía inquietante para ponernos a viajar de cabeza por nuestros confines más oscuros hacia la purgación. Atrévanse a escucharlo, a escuchar a Juan Cobo, sus letras punzantes y a esos requintos que atraviesan el cerebro como afeitadoras.
Los Días Invisibles
El Extraño
Por Luciana Musello
Desde que salió Los Días Invisibles en septiembre, cada vez que lo he escuchado, ha sido de principio a fin. No me aburre, no me cansa. Escuchar lo nuevo de El Extraño se me hace como sentir el vapor de una piscina en la noche, o como ver una cara seria, o una foto en blanco y negro. ¿Han visto la portada del disco? Esas imágenes muy post punk, incluso surferas, ya se notaban en “Volcán” y “Metroparc” -los singles de 2014 y 2015 que precedieron al disco- pero nunca con tanta intensidad como este año, en el que El Extraño se siente como una banda renovada que se ha deshecho definitivamente del “comportamiento-de-un-torso-animado” con que en el pasado completaban su nombre. Los Días Invisibles es un disco elegante: puede ser delicado y conmovedor como en «Remolinos», «Dunas» o “Los Días Invisibles”, canciones retro y anónimas sobre amar y no hacer mucho escándalo al respecto. Pero también puede ser veloz y enojado, como eco de lo que fue Mujer Pulpo (2012), su primer EP. Ese embale está en «Bisontes», «Batallas» o «Las Chicas Van En Auto» (este último, es el primer sencillo del disco que además es la canción del intro de Lo Nuevo RC). Por eso, si es que no habías seguido a El Extraño, Los Días Invisibles es el mejor lugar para empezar: resume los días de una banda que, a pesar de llevar casi nueve años tocando, aún se considera desconocida.
Red Rooms EP
Sexores
Por Alex Tamayo
Después de ser los pioneros a nivel nacional en explorar territorios del shoeganze con su álbum debut Historias de Frio en 2014, Sexores continúa su historia experimental con Red Rooms. A este disco añaden características del dream pop a su sonido sin abandonar su estilo obscuro. Si el disco anterior fue una mirada introspectiva, en este nuevo trabajo estrenado a mitad del año, Emilia Bahamonde y David Yépez se permiten influenciar por las realidades más crueles y deciden sentir y componer. Lo que hace a este disco resaltar en 2016, no solo es lo experimental y diferente de su sonoridad, sino también la sensibilidad durante su proceso creativo. Las atmósferas sonoras en conjunto con las letras dentro de Red Rooms hace que Sexores pueda plasmar verdaderos escenarios con su música. En producción con el sello discográfico italiano Coypu Records sacaron 250 cassettes en una edición limitada de Red Rooms. Una canción destacada es “USSR Girls”, en la que con toques electrónicos progresivos, alcanzan un clímax dentro de la canción en el que se describen las oscuras intenciones de la manipulación y seducción femenina.
Escape From The Machinery
Pilot EP
Por Juan José Geller
Muchos discos se lanzaron este año pero este llamó mi atención por sobre los demás. Por casualidad descubrí hace poco a la banda quiteña Escape From The Machinery y me llevé una gran sorpresa al encontrar una propuesta tan interesante y fresca para la escena local. El pasado noviembre presentaron su EP titulado Pilot compuesto por cuatro temas muy bien pensados, donde plantean un experimento sonoro repleto de matices que enseguida te ambientan en un viaje por el universo y por lo terrenal. En definitiva un buen trip instrumental que vale la pena escuchar de principio a fin. Banda recomendada para seguir este 2017.
La Madre Tirana
La Madre Tirana
Por Ernesto Sorzano Perry
Con los sonidos perfectamente canalizados, en el interior del primer disco de La Madre Tirana se puede encontrar desde la fuerza, hasta la delicadeza. El balance entre cada uno de sus temas crea una ruta, en la que el disco se direcciona con fluidez. Una idea que nació como el proyecto solista de José Orellana, compositor, productor e intérprete del disco entero terminó siendo una banda con un disco con el mismo nombre. Temas melódicos, distorsiones desbocadas y «baladas puntativas», como las llama el mismo José, es lo que integra al primer material discográfico de esta banda cuencana. Las letras del disco encapsulan una narrativa algo abstracta y obscura, con elementos metafóricos. José cuenta que la mayoría de las letras son en beneficio a su música y a sus melodías, pero que encuentran un sentido una vez que están hechas. Tras una grata sorpresa con este disco debut, lo seguirá un segundo álbum que saldrá en el 2017. Al parecer, será más complejo, con más arreglos y más colaborativo. Llevará, por supuesto, la misma esencia tiránica que tanto caracteriza a la Madre, algo que me impulsa a pensar en este como mi disco local predilecto de 2016.
Futuro Humano
Elia
Por Lucho Páez
En medio de ambientes que te envuelven con su sonoridad, se desarrolla Futuro Humano, lo último de Elia. El ex Motozen, ahora desde su residencia en Seattle, nos trae un disco que va desde el dream pop hasta el shoegaze. Teclados ambientales, riffs de guitarra pegajosos, y una voz que se mezcla suavemente con el mood que marcan los instrumentos, son los elementos que destacan en este disco. Estos ánimos varían desde temas con un beat muy bailable como “Libertad, Cultura y Fe”, hasta otros que son para disfrutar tranquilo con la cabeza en medio de tus audífonos como “Quiero Verte una Vez Más”. En su nuevo trabajo, Elia va más allá de la música y se transforma en un concepto visual que lo respalda. Una portada hermosa, más los videoclips de “NR1” y “Libertad, Cultura y Fe” son las pruebas que Futuro Humano no es un disco para dejar pasar. En todo caso, si solo tienen tiempo de escuchar un tema del disco, yo les recomiendo que ese sea “Amelia”.
