El rock es un género cuyas características se acercan muchas veces a lo primitivo. En particular, cuando levanta su naturaleza pasional, instintiva y espontánea. De cierta forma, nos une con nuestra natural dicotomía individual: por un lado está el deseo físico de saltar, cabecear y gritar. Y en contraparte, está la racionalidad del lado mental, espiritual y el mundo de los sueños y las sensaciones.
Un cazador apunta algo con su cerbatana en la jungla cerca del Puyo, en la Amazonía ecuatoriana. Este personaje se encuentra inmerso en una lucha contra su peor enemigo: él mismo. La soledad abrasadora de la vegetación le permite visualizarse a él como su mayor y único objetivo. Después de un tiempo, el cazador se convierte en su propia presa.
Inayu en el idioma Shuar- Chicham (Lengua de los hombres) es la palabra para el material resistente, ligero y preciso con el que se elaboran las flechas. La palma maripa en junto con el curare a través de rituales energéticos se convierten en una penetrante y rápida saeta letal.
La banda quiteña de rock fusión INAYU adopta este título por sugerencia de un guerrero shamán. A manera de ceremonia, en este territorio se tiene la costumbre de compartir los sueños y las premoniciones, en orden de una planificación de cosecha exitosa. La creencia en poder intuir el futuro hace de estos pueblos seres muy devotos de la energía, los amuletos y símbolos.
Su música intenta simular el destino de la flecha y penetrar en el espectador para invocar su sentir primigenio. Conectar al oyente con su bestia. Esta arma mortal es la que lidera el viaje hacia el interior. En este grado de conexión mente-cuerpo la conexión con el cosmos es inevitable, según los integrantes de la banda. Entre ellos, constantemente surge el cuestionamiento sobre las obligaciones de los seres humanos en la Tierra, por ejemplo, la protección de los otros seres vivos alrededor.
Por dentro, la esencia es salvaje, mientras que la relación con el entorno se vuelve más cercana y necesaria. Esta agrupación, con sus acordes y letras con aires de fortaleza, auspician una búsqueda poco consiente de un mayor equilibrio con lo que nos rodea. Mientras tanto, el tiempo juega a favor del descubrimiento personal.
De la misma forma que el cazador en la jungla, INAYU representa mediante su sonido rockero, un llamado al subconsciente.