Da Pawn, desde “La Butaca”

por Marcos Echeverría Ortiz

10h20: “Una bestia de banda”, grita un hipster cuando los Da Pawn dejan sus instrumentos y caminan hacia el fondo del escenario para meterse al camerino. Capaz, este es fue uno de los más raros e interesantes conciertos del grupo.

19h45: Las calles desniveladas del barrio La Floresta, entre La Madrid y Valladolid están deshabitadas. Aquel ambiente callejero de conversa pre concierto, de gente bien abrigada con chaquetas de cuero o sacos de lana viejos, ausenta. La única presencia por ahora, es el frío y una leve neblina. El único edificio abierto es un esquinero de luz blanca.

Adentro, en el tercer piso hay silencio y una puerta polarizada. Esta es la entrada oficial a un oscuro y pequeño primer cuarto del teatro, decorado con un gran espejo y una pequeña barra. Al frente está el escenario y tres personas en la prueba de sonido.  Se acerca uno de los organizadores dice: “Aún no comenzamos, sal por favor”.

20h10: Ya debió iniciar el concierto…Por las gradas sube el segundo grupo de gente desorientada: “Hola, este es el concierto de Da Pawn”, pregunta una chica.

Mauro Samaniego Da Pawn concierto Gabriel Perez radio cocoa

Foto: Gabriel Pérez

20h36: La fila es larga y el silencio del edifico se consume. Pablo Molina (guitarrista de Munn) sale de la puerta polarizada y hace el aviso: “Hola a todos. El Mauro (vocalista de Da Pawn) acaba de llamar y dice que está demorado. Que se ha de demorar unos 20 minutos. Así que cuando venga, jalaránle las orejas. Eso”. Tras su media vuelta, la gente aguarda unos tres segundos y lanza una carcajada.

20h50: ¡Ya va a comenzar! Abren la puerta y para ganar puesto hay que atravesar el pequeño cuarto, virar a la derecha y caminar  por un estrecho pasillo forrado de espejos. Adentro, la gente se abalanza a las 51 butacas , pero al final algunos pares de asientos quedan rechazados.  El teatro parece ser una oficina bien adaptada de no más de 10 metros de ancho por 30 de largo

21h06: Entran dos personas apresuradas con una guitarra y un amplificador. Atrás, Mauro entra fugaz y silenciosamente por en medio del pasillo y entre los espectadores. Pasa por el escenario y entra directamente al camerino. “Vele, ya llegó el atrasado. Ya era hora”, alguien comenta.

21h15: Oscuridad total. Al fondo aparece un destello amarillo y sale Da Pawn. El público no aplaude y la banda no saluda. Los músicos toman asiento, se miran, ríen y Mauro comienza el rasgado de su guitarra: ♫ Shack, shack, shack, shack…púm, pam, púm, púm, pan ♫….inician con “Cambio de Tonalidad”, una de las canciones más sólidas y originales que ha trascendido dentro de su Indie Folk. Algunos de los Da Pawn comienzan nerviosos, pero no tardan en agarrar confianza para sonar a tiempo.

Tras el tema, Mauro dice: “Este concierto está pensado para que sea medio informal (…) entre acústico y eléctrico, medio raro”. Regresa la mirada, discute algo con el grupo y comienza: El cálido y repetitivo teclado de Felipe Andino, más la potente batería de Pedro Ortiz inicia la melodía de “Taza de Café”, una canción fuerte, enérgica y espontánea que se asemeja a esa propuesta rock británica noventera marcada por Oasis.

Da Pawn concierto Gabriel Perez radio cocoa

Foto: Gabriel Pérez

Ahora viene “Mares de Argumentos”, un tema con sonidos muy latinos apegados al bossa. ¿El siguiente? “Los Muertos”, una canción que no ha sido grabada y que hoy, algunos han podido escucharla por primera vez.

21h35: La tanda acústica sigue y tras un corto silencio Mauro comenta: “Esta sí creo que se la saben, fue una de las que primero escribí”. Mira su guitarra, pone sus dedos en posición y comienza: “Intenté seguir la tonada, con mi garganta raspada…”. “Esta Era” es una canción reflexiva, no pretenciosa pero profunda y lírica, de aquellas que la interiorizas y que ahora, incita a corear a la mayoría del teatro.

La canción termina y Mauro pregunta: “¿Y ahora cuál tocamos?”. Se ríen en el escenario y por ahí se escucha: “¿Cuál será? ¿El Colchón?”…

¡Sí, El Colchón! Una canción fuerte y poética que define mucho el estilo general de estos seis músicos. Mauro mira al público y con voz entre cortada dice: “Este formato de concierto es raro, nunca hemos tocado así, tan íntimamente, es raro para nosotros”.

22h00: El concierto está próximo a finalizar. Aunque “Holograma”, “Luz Roja”, “Sueño Lúcido” y la mística  “Reloj de Arena”  ya sonaron, el público quiere más:

– “Nos quedan dos temas más, entonces…”
– “¡Camaleón!”, grita alguien del público.
– “¿Quieren Camaleón?”, pregunta Mauro.
– “Si, daleeee”, le responden.

Da Pawn concierto Gabriel Perez radio cocoa

Foto: Gabriel Pérez

22h10: Ahora se preparan para cerrar este show. Finalmente suena esa canción que inicia con una guitarra blusera. “Dibujo por hoy” es un tema con mucha identidad, es sorpresivo, dinámico y eso se refleja en los Da Pawn. Están sueltos, les divierte su música y en las butacas la están gozando. La mezcla de dos guitarras, una distorsionada y otra más lírica, suenan y se funden..así tratan de despedir la noche.

La banda se levanta, se dispone a meterse al camerino pero el público aplaude.

– “Ya no tenemos más canciones con la banda”, dice el vocalista.
– “No importa, otra”, responde la gente.
– “Bueno, entonces yo voy a tocar una más”.
– «¡Casi siempre!”, le dicen por ahí.
– “¿Pero si saben que esa canción no es de nosotros no?

La banda acepta y regresa decidida. Aunque es una canción suave, la reinterpretan, la transforman y la explotan en mil pedazos. Se entregan totalmente ¡cómo suenan! “…casi siempre, escapo del peligro por muy poco/ casi nunca, he ganado algo de este modo…”.  Retumba la batería, chillan la guitarras, conduce el bajo, pum pum….el teclado, la percusión…hay fuerza, hay ganas, hay magia…¡aquí hay música!

 

10h25: “Una bestia de banda”, grita un hipster cuando los Da Pawn dejan sus instrumentos y caminan hacia el fondo del escenario para meterse al camerino.

 

* Las fotos fueron tomadas en el concierto de Da Pawn en Cuenca.

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