Naranja Lázaro // Foto: Archivo de Banda
Estos fanáticos del rock guayaquileños llevan este proyecto desde 2010. Ha sido un camino a paso lento pero siempre enfocado. Su sonido representa un viaje exigente, detallista, minucioso y lleno de caprichos. Naranja Lázaro es un grupo que se dedica totalmente a la música y está enamorado de los decibeles de la vida. Esta diaria montaña rusa de emociones es su fuente infinita de inspiración para componer la letra sobre la melodía.
Después de borrar un disco casi sin explicación (Vivos, 2010 con el ex integrante Juan Carlos Larrea), de todos los medios y redes, la banda se rehúsa a morir y más bien se reinventa y graba. En el Funka Fest 2016 lanzaron un EP con tres canciones, una de las cuales fue convertida en videoclip. El video para «Más» fue dirigido por David López, bajista de la banda.
El EP llega con un contenido lírico cargado de vivencias. Por ejemplo, “Más”, encabeza la lista de aquellas experiencias que se vieron convertidas en canción. Es una historia de rompimiento y mucho alcohol compuesta por David López. En cambio,»Detrás de mí» habla sobre una relación específicamente sexual. Algunas de las canciones de Naranja Lázaro tienen significados que se han hecho públicos y son conocidos por todos. Pasa con “Canción de Asientos Traseros”, el segundo tema del EP, compuesto por Juan Carlos Coronel. «Es el recuerdo de una noche calurosa de Guayaquil, de paseo, el carro lleno, pero para mí solo estábamos ella y yo», cuenta él mismo.
Sin poner resistencia a su ímpetu de componer, van por más. En octubre de 2016 sacarán otro EP con las siguientes tres canciones.
Naranja Lázaro reafirma la esencia del rock a su manera, al conservar un sonido que revive décadas pasadas. La banda empezó con héroes claros que marcaron la influencia de su sonido. La memoria de Gustavo Cerati, Soda Stereo o Charly García, se percibe en la musicalidad de los Naranja.
Pero también los caracteriza ciertos métodos muy suyos con los que han tocado a lo largo de su carrera. Las notas limpias y el respeto a los solos de guitarra son algunas características que se repiten durante sus composiciones. Al evitar el uso de pedales y efectos, su música termina por adquirir una sonoridad como aquella del rock de los 70, pero con aires más contemporáneos.
Sin abandonar la alineación clásica del género, este cuarteto crea canciones de amor, sin caer en la cursilería. Y así como hablan de amor, pueden hablar también de nostalgia, de recuerdos y otras locuras que los divierten. Precisamente, su nombre es un ejemplo de esa dosis de randomness con que decoran su esencia musical y lírica.
“En realidad Naranja Lázaro salió de una caricatura de los 90, éramos chamos; y bueno, Pete y Pete de Nickelodeon era la onda”
<<La curiosa historia del nombre>>
Orange Lazarus es una peligrosa malteada que los hermanos Pete y Pete ansían probar en un cápitulo de la serie. Cuando finalmente lo logran, -a causa del congelamiento cerebral- cada uno alucina las mismas formas y colores, como si estuvieran conectados. “La realidad es que eso nos pasa a nosotros cuando tocamos juntos, solo que con más rock, blues y abundante heavy metal”, dice Juan Carlos sonriendo.
Naranja Lázaro / Foto: Archivo de la banda
Integrantes:
Juan Carlos Coronel – Voz y Guitarra
Ruben Burgos – Batería
David López – Bajo
Israel Bonnard – Guitarra
