Marcos Echeverría O. dirige el nuevo videoclip de El Extraño: una odisea interestelar por una carretera de asfalto y paseos sobre patines.
El nuevo videoclip de «Las Chicas Van En Auto» de El Extraño, no es tanto sobre las chicas ni sobre el auto, sino más bien sobre el <<van>>, es decir sobre el ir, el viaje. «Conceptualmente todo sucede en una carretera, es la representación de un viaje en la noche, como cuando estás en el asiento de un carro viendo por la ventana hacia el cielo», dice Marcos Echeverría Ortiz, ex Radio COCOA y director y editor del video.
El recorrido de ida y vuelta entre lo terrenal y el cielo, y la experiencia inmersiva que produce el videoclip de El Extraño, es el resultado del perfeccionamiento de una técnica de edición cuadro por cuadro, que cuajó entre fotografías, texturas encontradas y referencias vistas en su infancia. La historia se sincronizó con cada riff de guitarra, cada pum de batería y cada golpe del bajo.
Para apreciarlo en todo su esplendor, en Radio COCOA desciframos la motivación detrás de cada símbolo y cada elección estética, contada por Marcos.
The Twilight Zone
Lo primero que se me vino a la mente cuando escuché la canción fue una persecución acompañada de una sensación de adrenalina. Los coros le daban una sensación fantasmal, un ambiente paranormal. Esto me planteó la primera referencia: de chiquito veía mucho The Twilight Zone y esa sensación de tener miedo pero estar persuadido a ver, fue lo que marcó el tono del video. Esta es la intro de la serie:
Blanco y negro
Definitivamente el sonido de la canción marcó el blanco y negro. El post punk, los tiempos, la línea de bajo crean una sonoridad súper sofisticada, algo que se repite bastante en el disco Los Días Invisibles. Además los efectos y los recursos de capas que quería utilizar funcionaban en esta dualidad del blanco y negro, algo que no hubiera logrado hacer si mantenía el color.
Las chicas
Andrea Torres, protagonista del video / Foto: Sol Freire para www.proyectoalmauniversal.com
Su idea (la de El Extraño) era un video totalmente desligado de lo obvio de la letra. No querían un carro, por ejemplo. Hicimos una lista corta con algunos elementos que querían incluir, meter a alguien patinando fue su idea. Estoy casi seguro que quisieron una patinadora por Angel Olsen y esta canción.
Meter un personaje fue importante para la narrativa. Ahí se juntó todo. Yo quería que fuera alguien que comunique mucho con su cuerpo, no solo que sea un valor estético sino que la pose, su lenguaje corporal y presencia fuera más fuerte. Ella es el vínculo entre las estrellas y la carretera, me preocupé de que nada quede suelto y en ese afán, los patines, las ruedas y el moverse le quedaba perfecto al video.
La textura
Sketchbook de Marcos Echeverría O.
Nunca hago guiones de nada, simplemente desarrollo escaletas, secuencias de lo que quiero lograr. Este proceso siempre es espontáneo y está determinado por la canción. A medida de lo que iba escuchando iban apareciendo imágenes que iba dibujando en mi sketchbook, pero lo más bacán de todo es que nada cierro en guión. Lo cerré a medida que viajaba: últimamente estoy yendo mucho a la montaña por mi trabajo y siempre traía imágenes de montañas, árboles, rocas, volcanes, vegetación que luego incorporé al video y eso le daba muchísimo valor visual.
La composición
La edición fue hecha cuadro por cuadro, pieza por pieza. Para que tantos elementos tengan armonía tenían que estar bien compuestos, entonces tenía que de ley editar cuadro por cuadro para encontrar un balance, que se vea impactante sin que se pierdan cosas. Por eso si recorres el video segundo a segundo, vas a ver cómo todo se va intercalando ordenadamente.
